Varane sostiene la fe
Un doblete de franc谷s dio la victoria al Madrid en el 84. Benzema err車 ocasiones clar赤simas. El Huesca tuvo opciones: se adelant車 el marcador y estrell車 dos balones en la madera.
Flaquea la fe en el Madrid, que cuanto m芍s mira la tabla, m芍s dif赤cil le parece sobrevivir a ella. Pero a迆n quedan creyentes. El bal車n parado y Varane le dieron una victoria a la que no fue capaz de llegar en la suerte natural. Reapareci車 el reverso de Benzema, que dej車 escapar dos ocasiones de las que ya no quedan, fue insustancial Vinicius y Asensio anduvo en el cielo y en el suelo. Un tridente sin filo compensado por un central ambicioso ante un Huesca nuevo, con buenas perspectivas, que hizo un gol y estrell車 dos balones en el larguero.
El Madrid es una mala primavera. Nadie sabe si ma?ana saldr芍 el sol o arreciar芍 la lluvia, si ser芍 carne o pescado. Y as赤 resulta imposible salir ileso en competiciones de largo recorrido que se juegan en las cuatro estaciones del a?o. Anda ahora en la estaci車n seca tras la jibarizaci車n de la plantilla por lesiones, sanciones y jugadores en fuga y porque la entrega de dos t赤tulos en una semana le ha sumido en una depresi車n general, incluido Zidane, antes sonrisa del r谷gimen, ahora tan agrio como el ambiente que envuelve al equipo. Por fin descubrimos que no tiene piel de elefante. As赤 lleg車 a Huesca, con pocos jugadores y menos esperanzas, con m芍s aire de perseguido que de perseguidor.
Una salida explosiva del Huesca
Zidane no se sali車 de su hoja de ruta: los de siempre m芍s los repuestos donde hubiese ca赤dos. Y muchos ca赤dos (Hazard, Lucas V芍zquez, Rodrygo...) necesita ya Vinicius para estar en el once. Los dos meses de suplencia no s車lo acentuaron su falta de eficacia sino que le privaron hasta de la fotogenia. No se le recuerda una sola aventura en esa edad media a la que se vio abocado. En Huesca le dieron una oportunidad sin que tampoco se acercase a ese aprendiz de brujo que aparentaba.
Le cost車 entrar en materia, como al resto del equipo, incapaz de disimular su mal humor por la situaci車n en la tabla. De hecho, el Huesca pareci車 subirse de salida en ese trampol赤n del cambio de entrenador, que despierta a los fijos, por incierto, y a los olvidados, por esperanzador. En un solo minuto Okazaki estuvo a punto de hacer bingo en un remate en el primer palo y Rafa Mir estrell車 un disparo en el lateral de la red.

No fue m芍s all芍 en la primera mitad. Le dio el bal車n a ese Madrid desdentado y esper車 que un golpe de viento le llevara a adelantarse en el marcador. El Madrid mand車 entonces con soser赤a, como tantas veces, sin convicci車n para darle carpetazo a uno de los asuntos con mejor resoluci車n de los que le esperan. El colista siempre invita a la redenci車n.
Pero nada sugiri車 entusiasmo en el Madrid durante la primera media hora. A partir de ah赤, Kroos y Modric comenzaron a encontrar filtraciones en esa pared de tres centrales del Huesca. Vinicius estuvo cerca del gol en una vaselina ante la salida de ?lvaro Fern芍ndez en una arrancada en fuera de juego de VAR y Benzema se esmer車 en un disparo lejano que rechaz車 el meta del Huesca. Dos oportunidades de medio pelo en un equipo que no fue a por el partido como si le fuera la vida en ello porque sabe que no le va. En ese tramo siempre le falt車 algo a Asensio. Es una constante en su carrera. No hay mejor materia prima (velocidad, remate, conducci車n, pegada...), pero la manufactura es otra cosa. Ese talento a punto de despegar eternamente sigue en tierra.
La remontada
El Huesca, al otro lado, asumi車 vivir de espaldas a Courtois. Defendi車 con orden y aplicaci車n, esperando que al Madrid se le fuera el santo al cielo, hecho recurrente esta temporada. Y ah赤 est芍n derrotas marcianas ante C芍diz o Alav谷s o empates impensables como el de Elche, equipos todos herm谷ticos, huidizos del cara a cara.
Y se repiti車 el caso, esta vez con preaviso. A vuelta del descanso, Mikel Rico remat車 como pudo y sobre la marcha una pelota que se columpi車 en el larguero. Y dos minutos despu谷s, Okazaki arranc車 en la derecha, cambi車 el tercio hacia la izquierda y Javi Gal芍n cruz車 su excepcional remate a la red. Un golazo con el Madrid descompuesto en el repliegue. Hubo m芍s en esos cinco minutos locos: Rafa Mir repiti車 larguero en un bote pronto tras el tercer contragolpe oscense en un pesta?eo.
Otra vez Varane
El p芍nico pas車 pronto. Gast車n Silva derrib車 cerca del 芍rea a Asensio, que iniciaba una contra. Un mal menor convertido en mal mayor, porque Benzema, sin otro especialista en 400 kil車metros a la redonda, mand車 su misil al larguero y el rechace llovido lo cabece車 a la red Varane. El partido ya era otro, m芍s s赤smico y m芍s divertido: Asensio tir車 al lateral de la red, Courtois salv車 un gol de Mir, ?lvaro Fern芍ndez otro de Benzema, Marcelo (relevo del exhausto Odriozola) roz車 el palo, Rafa Mir tambi谷n...
Sin el ariete de guardia, Ramos, lleg車 al partido Mariano. Era el mejor momento de Asensio, el m芍s dispuesto y el mejor dotado para desenredar el partido. Antes, Benzema hab赤a dejado pasar la oportunidad del partido. A dos metros de meta le parti車 el pecho a ?lvaro Fern芍ndez, que procuraba ponerse en pie a duras penas. Uno de esos errores que recorren los telediarios del d赤a despu谷s. Y a seis minutos del final, Varane, aprovechando otro rechace del gran meta del Huesca, salv車 a un Madrid al borde de la desconexi車n.