Otra vez a bajo cero
El Madrid se estrella por falta de ataque ante otro equipo del sur de la tabla. Hazard fue titular y no marc¨® diferencias. Ramos acab¨® de nueve. El orden de Osasuna tuvo su premio.
Cambia la estaci¨®n, aparece la Liga polar y el Madrid sigue en el mismo sitio: inv¨¢lido ante equipos herm¨¦ticos, sea cual sea su condici¨®n. En El Sadar se encontr¨® una noche y un rival desapacibles y el abuso de la pelota no le condujo al gol, mal end¨¦mico. Por ah¨ª se le est¨¢ marchando esta Liga, porque la aplicaci¨®n y la firmeza defensiva ya no dan para cazar a un Atl¨¦tico disparado.
Zidane decidi¨® que, incluso con Filomena desatada, ya va siendo hora y puso de salida a Hazard, que hab¨ªa jugado 29 minutos en el ¨²ltimo mes y medio, para que empiece una nueva vida. As¨ª entr¨® el hombre que pas¨® de figura a fisura en un partido ¨¢rtico, pendiente hasta el final del Meteosat, los calentadores y 40 quitanieves humanos. Y para hacerle sitio desconfigur¨® al equipo. No conven¨ªa sentar al mejor Asensio en meses y le cambi¨® de banda. No merec¨ªa salir Lucas V¨¢zquez y le devolvi¨® al lateral. En definitiva, toc¨® lo que funcionaba para colar a Hazard, que est¨¢ muy lejos de s¨ª mismo. Quiz¨¢ vuelva, pero no parece que pronto. Y qued¨® claro que Asensio produce m¨¢s en la izquierda y que Lucas tiene m¨¢s picante como extremo.
Sin pegada
El primer pitido de Soto desat¨® de nuevo la tormenta y al Madrid, que hab¨ªa sorteado dos palmos de nieve y cuatro de indignaci¨®n en la v¨ªspera para estar en El Sadar, le entraron las prisas por abreviar. Por el clima, por el rival, por la inseguridad que le provoca su situaci¨®n en la tabla o porque sin afici¨®n resulta m¨¢s dif¨ªcil intimidar, la primera presi¨®n de Osasuna fue tibia. Tambi¨¦n su alineaci¨®n, con punta y medio y Budimir en el banquillo. Lo que sucede es que el Madrid ha sustituido abnegaci¨®n por pegada y eso ralentiza los tr¨¢mites.
Al Madrid le cuesta masticar las ocasiones y no digamos los goles. Manda mucho para anotar poco. Y pierde el ¨¢nimo cuando se demora en marcar diferencias. Al cuarto de hora se le fue una clara, en la primera conexi¨®n inal¨¢mbrica Benzema-Hazard que concluy¨® con remate defectuoso del belga sobre un c¨¦sped semiblanqueado y traicionero. Con Mendy alargad¨ªsimo en la izquierda, Hazard se alist¨® como mediapunta. Aquella parec¨ªa tierra de oportunidades, pero no con esta superficie, apta para patinadores. Esa es zona que exige m¨¢xima precisi¨®n y esta vez era imposible trazar bien el ¨²ltimo pase.
Osasuna lo fio todo a lo que cazara arriba Calleri, uno de esos nueves de percusi¨®n a los que no molesta el bal¨®n largo ni los periodos prolongados de inactividad. Y por detr¨¢s, un grupo ordenado, inteligente en su encierro, sin desatenciones. Incluso se permiti¨® un minuto loco en el ¨¢rea del Madrid. Courtois le detuvo el cabezazo a Oier y el resto de remates top¨® con una pared blanca. La respuesta del Madrid antes del descanso fue poco imaginativa: centros al por mayor al ¨¢rea sin que apareciese un rematador.
Tres nueves
La segunda mitad trajo dos novedades: una presi¨®n m¨¢s invasiva de Osasuna y un mejor juego interior del Madrid, que en corto empez¨® a manejarse mejor. La primera consecuencia fue un remate de Asensio que rechaz¨® Sergio Herrera. La segunda, un gol anulado a Benzema por fuera de juego indiscutible. Mientras se le iba el tiempo, Zidane meti¨® a Valverde a costa de Asensio. Pana por seda en la derecha. No hubo efecto inmediato. Hazard acentu¨® su tendencia a irse al centro, pero al Madrid no se le aparec¨ªan los espacios. Y como la cosa volvi¨® a derivar en balones a la cazuela lleg¨® Mariano, acompa?ado de Isco, dos olvidados. A Hazard se le iba otro tren.
Los cambios no mejoraron al Madrid. Isco est¨¢ lej¨ªsimos de Modric, que le puso mala cara su salida. Mariano tambi¨¦n anduvo perdido en el zarzal osasunista. As¨ª que acabaron reclamando al tercer nueve, Ramos, al que anularon un gol. El ¨²ltimo remedio, el s¨ªntoma inequ¨ªvoco de la desesperaci¨®n que alguna vez result¨®. No esta vez en un equipo inestable que lleg¨® en alerta rojilla y sali¨® de El Sadar en alerta roja.