Un Espanyol sin estridencias
El equipo de Vicente Moreno, a punto de cerrar la primera vuelta, no da la nota ni en La Liga ni el Copa, donde se mantiene igual de firme y eficaz.


El especialista. Haga el calor de agosto o el fr¨ªo de enero, ya sea en una soleada tarde en Cornell¨¤ o en la noche cerrada de Burgos, el Espanyol act¨²a con el oficio de un especialista, sin fallar, sin estridencias, con una seguridad y sangre fr¨ªa pasmosas. Es lo que se volvi¨® a ver en El Plant¨ªo, ante un rival que demostr¨® su candidatura a ascender a Segunda A y que por momentos tuvo a los blanquiazules contra las cuerdas. Pero poco les import¨® a los de Vicente Moreno, quienes han aprendido a sufrir como nadie y a hacer valer sus virtudes en ataque. No hay meteduras de pata en una primera vuelta en la que todo ha fluido de manera l¨®gica.
El m¨¦rito. Porque El Plant¨ªo remite a otra ¨¦poca, como el Muro de Berl¨ªn o el 'casette', y hasta la imagen televisiva fue consecuente, con un color de todo menos n¨ªtido, con un campo helado. Un escenario propicio para tropezar, sobre todo si ocho de tus mejores jugadores (al menos titulares) se han quedado en Barcelona. Y ah¨ª radica el m¨¦rito del Espanyol, cuyo fondo de armario se adapta a cualquier temperatura y camina en la Copa tan firme y eficaz como en La Liga, donde solo ha perdido en cuatro ocasiones ante Rayo, Legan¨¦s, Girona y Las Palmas. Ganar como h¨¢bito, como lavarse los dientes.
Al alza. La victoria del Espanyol se fragu¨® en sus huesos, irrompibles. Hay en el equipo un esqueleto que nunca se viene abajo, un convencimiento en que el partido caer¨¢ de su lado en cualquier momento. Al margen de esa protecci¨®n, varios jugadores sujetaron al equipo en los momentos delicados, como Oier, de nuevo salvador, o Pol Lozano, en esta ocasi¨®n m¨¢s acertado en todas sus acciones y fajador en mediocampo ante los ataques burgaleses. En ataque, Melamed fue de nuevo m¨¢s determinante que Vargas, mientras que Max Svensson logr¨® lo que a¨²n no ha podido Campuzano o Vadillo, golear.

Wu Lei. Menci¨®n aparte merece el delantero chino, de nuevo goleador. Nadie puede reprocharle a Lei su tes¨®n y constancia en cada encuentro logre ver puerta o no. Lleg¨® de un f¨²tbol menos desarrollado y su proceso formativo tiene m¨²ltiples lagunas, pero las suple con su desmarque y velocidad, dos cualidades que, bien interpretadas, le aportan al equipo lo que le falta a jugadores menos incisivos al espacio, como RdT o Campuzano. Un jugador que ya ha anotado 14 goles en 83 partidos de perico.
Un sue?o ut¨®pico. De todas las virtudes de Vicente Moreno, una de las m¨¢s notorias es la gesti¨®n del grupo. Tanto que, sin caerle los anillos, dej¨® el protagonismo de este encuentro a su ayudante y amigo Dani Pend¨ªn, toda una instituci¨®n en Burgos, quien recibi¨® un homenaje. El t¨¦cnico valenciano entiende la temporada como un trabajo colectivo, de su cuerpo t¨¦cnico y de la plantilla. Por eso so?ar con llegar muy lejos en la Copa puede suponer un utop¨ªa. El equipo de Llagostera y Burgos ser¨¢ el de las siguientes rondas. Es la mejor decisi¨®n para que todo el grupo est¨¦ enchufado y para evitar sobrecargas en jugadores importantes en La Liga, donde radica el ¨²nico objetivo del curso. Sea lo que tenga que ser en esta competici¨®n, el Espanyol seguir¨¢ siendo un equipo sin estridencias.