Ignasi Miquel, el oportunista
El central del Legan¨¦s inici¨® el curso como suplente habitual. La lesi¨®n de Omeruo y su buen hacer desde entonces, le han permitido asentarse en el puesto.
En el fichaje de Ignasi Miquel por el Legan¨¦s a mediados de septiembre hubo algo de acontecimiento hist¨®rico, aunque fuera s¨®lo a corto plazo. El central catal¨¢n (Barcelona, 28 a?os) era el primer jugador en 22 a?os llegado a Butarque tras una negociaci¨®n directa con el Getafe. El ¨²ltimo precedente similar data de 1998, cuando el Lega acord¨® con el eterno enemigo la incorporaci¨®n de Sierra por cinco millones de pesetas, al cambio actual unos 30.000 euros. Acontecimiento anecd¨®tico con el que Miquel inaugur¨® un periplo blanquiazul que empez¨® en la sombra y ahora vive bajo los focos. Su oportunismo ha sido clave para convertirlo en uno de los baluartes actuales del Legan¨¦s.
Jos¨¦ Luis Mart¨ª, entrenador de los pepineros, dio el visto bueno a su incorporaci¨®n. Lo tuvo en el Girona y con ¨¦l ejerci¨® de titular habitual. De los 24 partidos oficiales que jug¨® este ex del Arsenal (lleg¨® a Londres siendo cadete), casi la mitad -once- lo hizo con el t¨¦cnico mallorqu¨ªn al mando. Confianza mutua que ahora se demuestra con su presencia recurrente en el once. Claro que para que Miquel se ganara el puesto, tuvo que esperar turno.
Porque en el arranque de Liga Mart¨ª us¨® a Rodrigo Tar¨ªn y Kenneth Omeruo como su dupla de centrales habitual. Tras probar al propio Miquel y Sergio Gonz¨¢lez, el entrenador se decidi¨® por ambos para formar eje en la zaga. Sin embargo, Omeruo se lesion¨® contra el Mirand¨¦s en la 10? jornada y eso abri¨® una vacante en la que Miquel se ha instalado para, primero, crecer en su rendimiento, y despu¨¦s asentarse como titular. Oportunismo trabajado y provechoso, del que gusta a todo entrenador.
Recibe m¨¢s faltas que las que le pitan
El inicio de su curso no fue del todo positivo, con algunos errores llamativos de posici¨®n o circulaci¨®n de la pelota. Sin embargo, cuantos m¨¢s minutos tuvo y m¨¢s endureci¨® su piel el resto del equipo (el actual Legan¨¦s es mucho m¨¢s defensivo que el de principios de temporada), m¨¢s empez¨® a lucir sus virtudes arrinconando sus defectos.
En el marcaje es roca firme. Los delanteros contrarios sufren con su intensidad f¨ªsica y capacidad para mantenerlos a raya sin romper el reglamento¡ pero casi al l¨ªmite de la norma. Ardor bien entendido que dice que aprendi¨® de Bordal¨¢s cuando, en el Getafe, le inyect¨® en el alma la importancia de dejarse la piel en cada bal¨®n.
Estas virtudes lo convierten en el defensa pepinero con Bustinza que m¨¢s duelos a¨¦reos ha ganado (30) y, pese a ello, s¨®lo ha visto una amarilla. Sucede, adem¨¢s, que ha recibido m¨¢s faltas (siete) que las que ha hecho (seis). La picard¨ªa es tambi¨¦n una de sus herramientas.
Ahora, pese a que Omeruo ha retornado (volvi¨® ante el Rayo el pasado m¨ªercoles), todo apunta a que Miquel continuar¨¢ ejerciendo estas caracter¨ªsticas en una defensa en la que, por cierto, es el ¨²nico central zurdo, lo que le otorga una notable ventaja competitiva para jugar de inicio con frecuencia.