Se cumple un a?o del milagro Aguirre que pudo ser y no fue
El 4 de noviembre de 2019, Javier Aguirre firm¨® como nuevo entrenador del Legan¨¦s. Pese a los muchos obst¨¢culos, dej¨® al equipo al borde de una salvaci¨®n que se daba por imposible.

Sucedi¨® hace un a?o y nadie esperaba que tuviera ¨¦xito porque la misi¨®n ya entonces parec¨ªa muy complicada. Casi imposible. No, no tuvo ¨¦xito, pero por poco. Por apenas una mano. Literal. Tal d¨ªa como hoy, el 4 de noviembre de 2019, el Legan¨¦s anunci¨® el fichaje de Javier Aguirre como su nuevo entrenador en sustituci¨®n del interino Luis Cembranos que, a su vez, hab¨ªa suplido dos semanas antes a Mauricio Pellegrino.
La llegada del Vasco a Butarque supuso un terremoto que dej¨® a los blanquiazules al borde de la salvaci¨®n, pese a los mil problemas con los que se encontr¨® en su camino. S¨®lo la falta de tino en la ¨²ltima jornada contra el Real Madrid y un penalti no pitado por manos de Jovic evitaron que el mexicano solventara con ¨¦xito lo que justo hoy, hace un a?o, parec¨ªa imposible.
Proyecci¨®n de 45 puntos
Porque cuando Aguirre cogi¨® al Legan¨¦s, los pepineros eran ¨²ltimos, con s¨®lo cinco puntos tras doce jornadas. ¡°Una mochila demasiado pesada¡±, como sol¨ªa repetir en sala de prensa. La salvaci¨®n estaba a seis. Ning¨²n equipo en la ¨¦lite hab¨ªa logrado la haza?a de evitar el descenso con esos guarismos. Tampoco lo evit¨® el Legan¨¦s. El curso lo termin¨® tercero por la cola, con 36 puntos, a s¨®lo uno de los 37 con los que el Celta se salv¨®.
Es decir, que Aguirre cosech¨® 31 puntos en 26 partidos, a una media de 1,19 puntos por partido que, de haber comenzado el torneo con el fichaje del mexicano, habr¨ªa dejado al Legan¨¦s 13?. Con esta proyecci¨®n de puntos, en una Liga a 38 partidos, el Lega habr¨ªa sumado 45 puntos, los mismos que consigui¨® Pellegrino en su primera temporada en Butarque, la mejor de los pepineros en la ¨¦lite.
Mil problemas y mil remontadas
Pero son ¨¦stas unas cuentas arenosas. Se escapan entre los dedos sin que sirvan de nada. Casi como se marcharon de Butarque las dos estrellas del equipo blanquiazul. Las salidas de En Nesyri (en enero) y sobre todo la de Braithwaite (en febrero) supusieron dos dur¨ªsimos golpes de los que el Lega se recuper¨® justo antes del confinamiento. Su ¨²ltimo partido previo al par¨®n del torneo fue un triunfo en Villarreal. Hab¨ªa esperanzas.
El fin de la actividad supuso un periodo agitado de puertas para adentro con una dura negociaci¨®n sobre posibles recortes salariales en los que el Vasco ejerci¨® de pegamento con la plantilla. Alcanzado un acuerdo y retomado el torneo, el Legan¨¦s jug¨® dos torneos en la miniliguilla de 11 partidos. El inicial, con un arranque horrible: en los primeros seis partidos acumul¨® s¨®lo dos puntos.
Cuando Butarque ol¨ªa m¨¢s a azufre, lleg¨® el (casi) milagro. En los ¨²ltimos partidos el Legan¨¦s sum¨® tres victorias y dos empates (once puntos) que le hicieron rozar el milagro de la salvaci¨®n.
El Legan¨¦s le ofreci¨® seguir
Tras aquello, al mismo d¨ªa siguiente, el Legan¨¦s ofreci¨® la posibilidad de continuar al entrenador en una comunicaci¨®n verbal que tuvo como respuesta el ¡®no¡¯ del Vasco. Cuenta desde su entorno que fue el descenso, el primero de toda su carrera, lo que le hizo marcharse. No entrenar¨ªa en Segunda. De haberse logrado la permanencia, insisten, se lo habr¨ªa pensado y, seguramente, aceptado. En los d¨ªas previos, sin embargo, otras voces tambi¨¦n cercanas a Aguirre suger¨ªan que la decisi¨®n estaba tomada y que, pasara lo que pasara, Aguirre se marchar¨ªa.
La despedida lleg¨® fugaz. Tras dar su ¨²ltima rueda de prensa telem¨¢tica, se mont¨® en un coche conducido por un amigo y sali¨® de Butarque saludando a una veintena de chavales que se arremolinaron alrededor del veh¨ªculo. Fue la ¨²ltima vez que se le vio por Legan¨¦s. Al d¨ªa siguiente cogi¨® un avi¨®n rumbo a M¨¦xico donde inici¨® sus vacaciones y tambi¨¦n un silencio que a¨²n hoy dura. El Vasco espera ahora alguna oportunidad para volver a los banquillos, a ser posible en la ¨¦lite espa?ola o europea, con la agridulce sensaci¨®n de haber llevado al Legan¨¦s a un milagro que pudo ser¡ y no fue.