GRUPO G | BARCELONA 2-DINAMO KIEV 1
El Bar?a juega con fuego
Partidazo del guardameta en su regreso que permite al Bar?a ser m¨¢s l¨ªder. Messi, de penalti, y Piqu¨¦, goleadores. Neshcheret tambi¨¦n brill¨® en la porter¨ªa ucraniana.
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El Bar?a encamina su clasificaci¨®n para los octavos de final de la Champions consolidando su primera plaza del grupo, pero la realidad del juego cul¨¦ desmiente la solidez de las matem¨¢ticas. El Bar?a jug¨® con fuego y flirte¨® con el desastre ante un Dinamo de Kiev en cuadro al que gan¨® por 2-1 en un duelo en el que brillaron los porteros de ambos equipos.
Si lo peor que le puede pasar a un paranoico es que le persigan de verdad, lo peor que le puede pasar a un equipo con evidentes problemas de cara a la porter¨ªa contraria es fallar tres ocasiones cantadas en los tres primeros minutos de partido. Eso es lo que le pas¨® ayer al Bar?a ante un mermado por el COVID que presentaba en la porter¨ªa a un ni?o llamado Ruslan Nescheret.
El portero ucranio cumpli¨® con otra de las normas que aterrorizan a los equipos que, como el Bar?a, est¨¢n en crisis con el gol: encontrarse con un chaval an¨®nimo que se saca un partidazo soberbio que no olvidar¨¢ en la vida.
El Bar?a empez¨® con br¨ªo y dando la sensaci¨®n de que los 90 minutos para el Dinamo de Kiev iban a ser una tortura. Messi marc¨® de nuevo de penalti a los cinco minutos de partido. Una pena m¨¢xima se?alada tras derribo a Messi por Michael Oliver con la mayor desgana que se haya visto en un campo de f¨²tbol. Ante su gesto nadie se atrevi¨® a protestar porque pareci¨® que hasta al propio ¨¢rbitro le daba pereza se?alar lo que acababa de ver.
Tras el 1-0, el Bar?a fue un vendaval de ocasiones en las que Pedri casi derrumba el larguero y Griezmann se derrumb¨® ¨¦l al fallar a porter¨ªa vac¨ªa. Ya no levantar¨ªa cabeza. Luego llegaron las ocasiones de Ansu donde Nescheret empez¨® a venirse arriba hasta el punto de lucirse tambi¨¦n contra Messi.
El Bar?a, presionaba, mov¨ªa bien la pelota y creaba ocasiones, pero cuando miraba al marcador y ve¨ªa que s¨®lo iba 1-0 y de penalti le entraron todos los males. Como el paranoico que descubre que le persiguen de verdad, los jugadores del Bar?a fueron conscientes de que tienen un problema con el gol.
Ante esta realidad, se achicaron y el Dinamo de Kiev pudo sacar la cabeza para respirar y decir aqu¨ª estoy yo. Incluso pusieron el miedo en el cuerpo cul¨¦ con un par de contragolpes y un remate de cabeza ante el que se luci¨® Ter Stegen, de vuelta al marco blaugrana.
La primera parte acab¨® como empez¨®, con el joven Nescheret record¨¢ndole al Bar?a su falta de punter¨ªa y luci¨¦ndose ante Pedri y Ansu. En el descanso, m¨¢s que un t¨¦cnico, el Bar?a necesitaba un psic¨®logo.
Pero si el inicio de la primera parte fue frustrante por las ocasiones falladas, la segunda fue un drama que s¨®lo evitaron Ter Stegen y Piqu¨¦. En la primera jugada, Ter Stegen evit¨® el empate en un uno contra uno y en el saque de esquina consecuente marcaba el Dinamo, pero el tanto era anulado porque el bal¨®n hab¨ªa salido de fondo en su vuelo y dos minutos despu¨¦s salvaba de nuevo el empate ante Buyalskiy. M¨¢s adelante, volver¨ªa a realizar otro milagro ante Supryaha.
Cualquier intento de reacci¨®n del Bar?a, como una falta lanzada por Messi o un cabezazo a boca de gol de Sergi Roberto era conjurado por un Nescheret, ya gigantesco, que sosten¨ªa a su equipo en su segundo partido como profesional. El primero lo jug¨® el s¨¢bado pasado.
Ante el atasco de los delanteros, fue Piqu¨¦ quien rompi¨® el hechizo de la noche del joven portero al rematar de cabeza un centro de Ansu. Pero ni as¨ª el Bar?a pudo respirar tranquilo. Tsygankov recogi¨® el rebote del en¨¦simo parad¨®n de Ter Stegen para acortar distancias y mantener la tensi¨®n hasta el ¨²ltimo momento, donde Nescheret volvi¨® a sacarse un nuevo parad¨®n ante Demb¨¦l¨¦. De haber habido p¨²blico, el chaval se habr¨ªa ido entre aplausos. Y el Bar?a, entre murmullos de desaprobaci¨®n.