La falsa revoluci¨®n de Bartomeu
Habl¨® de decisiones tomadas despu¨¦s del hist¨®rico rid¨ªculo de Lisboa, pero vacas sagradas como Busquets, Alba o Umtiti siguen y ya se teme que Su¨¢rez tampoco se ir¨¢.
En lo que puede resultar la paradoja definitiva de Bartomeu, la no-revoluci¨®n del Bar?a est¨¢ a punto de consumarse. El 14 de agosto, despu¨¦s la doloros¨ªsima humillaci¨®n del 2-8 de Lisboa, el presidente del Bar?a dijo esto: "En los pr¨®ximos d¨ªas tomaremos decisiones. Muchas de ellas ya las hab¨ªamos tomado antes de que empezara esta Champions". Se dio por hecho que jugadores como Sergio Busquets, Jordi Alba y Luis Su¨¢rez, vacas sagradas del vestuario que ya llegaban tocados a Portugal, estaban fuera del Bar?a. Eso, m¨¢s all¨¢ de Rakitic, Vidal y Umtiti, que directamente se borr¨® del final de tempoada y un buen d¨ªa lleg¨® al vestuario y dijo: "Ya no juego m¨¢s".
D¨ªas despu¨¦s, en los medios oficiales del club, Bartomeu anunci¨® "despedidas con honores" a algunas de las leyendas y el barcelonismo fantase¨® con una revoluci¨®n que consideraba m¨¢s necesaria que nunca. Pasado un mes, sin embargo, resulta que nada ha cambiado en el Bar?a. S¨®lo se han despedido Rakitic, jugador ya con poco espec¨ªfico en la temporada 2019-20, y Arturo Vidal est¨¢ rumbo a Mil¨¢n. Pero Alba (contrato hasta 2024), Busquets (hasta 2023) y Su¨¢rez (2021) siguen. Piqu¨¦, que se ofreci¨® para dar un paso al lado si era necesario, tambi¨¦n (su contrato expira en 2022). Diez titulares de Lisboa (Ter Stegen, Semedo, Piqu¨¦, Lenglet, Alba, Busquets, De Jong, Sergi Roberto, Messi y Su¨¢rez) siguen en la plantilla y a jugadores como Todibo, J¨²nior, Braithwaite o Rafinha no se les encuentra destino. Jugadores que eran claves en la reconstrucci¨®n, como el argentino Lautaro, no pueden fichar porque no hay un euro en la caja.
La frase de Messi va cogiendo fuerza. "Hace tiempo que no hay proyecto ni hay nada, se van haciendo malabares y van tapando agujeros", critic¨® en la entrevista a Goal en la que confirm¨® que seguir¨ªa en el Bar?a. El tiempo le da la raz¨®n. Messi quer¨ªa irse y deber¨¢ quedarse. El club quiere echar a Su¨¢rez e igual se lo traga. Y con Umtiti, Alba y Busquets, el presidente ha sido esclavo de los largos contratos que firm¨®. A los canteranos, miedoso del qu¨¦ dir¨¢n. A Umtiti, desoyendo incluso a expertos. El caso de Su¨¢rez, tal vez, sea en el que m¨¢s en evidencia ha quedado el club. Utiliz¨® a Koeman para decirle que no contaba con ¨¦l y ahora igual se lo deja en el vestuario. El uruguayo lo tiene claro. Con un a?o m¨¢s de contrato, no se mover¨¢ si no cobra hasta el ¨²ltimo euro. Y Koeman ya empieza a desmarcarse del club. "Si se queda, ser¨¢ uno m¨¢s de la plantilla", ha avisado a navegantes. La revoluci¨®n de Bartomeu ha sido fallida. O tal vez Bartomeu ya sab¨ªa que no pod¨ªa hacerla. Pero a pocos meses de dejar el cargo, tal vez piense qu¨¦ m¨¢s da.