CITY - REAL MADRID | LA INTRAHISTORIA
El d¨ªa que Silva estuvo a punto de jugar en el Real Madrid
Con apenas 12 a?os, el canario visit¨® la vieja Ciudad Deportiva con su padre y el presidente del Arguinegu¨ªn, equipo en el que militaba entonces, para hacer una prueba con los blancos.
Si diez a?os en un mismo equipo hoy d¨ªa parecen una eternidad en un f¨²tbol dominado por un mercado vertiginoso, el destino pudo hacer que David Silva marcara una ¨¦poca en el Real Madrid. Siendo todav¨ªa un ni?o, con solo 12 a?os paso unas pruebas con el equipo blanco en la vieja Ciudad Deportiva. Era a¨²n el siglo pasado, 1998. Viaj¨® a Madrid acompa?ado por su padre, Fernando, y por Vicente Miranda, entonces presidente del Arguinegu¨ªn. Sus cualidades impresionaron al propio M¨ªchel, que acud¨ªa a ver los progresos de su hijo en la cantera blanca. "Este se queda seguro", dijo el exfutbolista, seg¨²n cont¨® Miranda en 2007 en AS. En La F¨¢brica lo descartaron por su baja estatura. "Cuando tienes que tomar 100 decisiones al a?o, es normal que alguna sea equivocada", lamentaba Sixto Alonso, el ojeador que lo hab¨ªa recomendado.
Coincidiendo con el cambio de siglo, Silva acab¨® recalando con 14 a?os en el Valencia. De all¨ª sali¨® cedido al Eibar en la 2004-05 para que se fogueara como profesional en Segunda. Su paso por el conjunto armero le vali¨® una 'presentaci¨®n' con el Real Madrid. Un gesto en un partido contra el Lleida (tir¨® el bal¨®n fuera en el descuento con empate en el marcador y en disposici¨®n franca de gol al percatarse de que hab¨ªa un rival tendido en el suelo), le vali¨® el Premio a los Valores Humanos en el Deporte. Butrague?o y Di St¨¦fano le entregaron el galard¨®n y posaron junto a Silva con una camiseta del Madrid con su inseparable dorsal 21 como si de una presentaci¨®n se tratase. Nunca lleg¨® a vestirla. Aunque calidad para haberlo hecho ha demostrado de sobra que no le falta...