Historias de ida y vuelta
Monchi, director deportivo hispalense, se reencuentra con una Roma en la que militan dos exsevillistas proscritos: Perotti y Fazio.


El atractivo de la eliminatoria entre Sevilla y Roma radica, adem¨¢s de en el nivel de los equipos, est¨¢ en los reencuentros que se generan en este enfrentamiento. La pandemia ha evitado el morbo de saber c¨®mo se recibir¨ªa en Roma a Monchi, el director deportivo que en a?o y medio sali¨® por la puerta de atr¨¢s a pesar de meter a los italianos en unas semifinales de la Champions. Por otra parte, la eliminatoria en campo neutral tambi¨¦n le ha ahorrado a los exsevillistas Federico Fazio y Diego Perotti la sonora bronca con la que hubieran sido recibidos en un Pizju¨¢n en el que son considerados poco menos que proscritos.
El balance de Monchi en Roma es de un tercer puesto y unas semifinales de la Champions League en su primera temporada en la capital italiana. Y el econ¨®mico es de 80 millones de euros de beneficio entre las compras y las ventas realizadas. Pero todo esto qued¨® en papel mojado cuando comenzaron las discrepancias con el due?o de la entidad, James Pallotta.
Adem¨¢s de que algunos fichajes se pusieran en duda por parte del m¨¢ximo mandatario romano, la gota que colm¨® el vaso fue la exigencia de Pallotta de destituir al entrenador Di Francesco. Monchi se opuso y el resto ya es historia. Hasta el propio Totti critic¨® la salida de Monchi. "No le han dejado trabajar", declar¨® el mito romano, lo que no quita que sean mayor¨ªa los que en la Roma le tengan ganas a Monchi.
D¨²o
Pero si mal sali¨® Monchi de Roma, qu¨¦ se puede decir de los dos exsevillistas que militan en el conjunto italiano, Perotti y Fazio. Al primero incluso se le lleg¨® a pitar despu¨¦s de marcar un gol tras tener varios encontronazos con los Biris. Con Fazio, por su parte, siempre existi¨® una relaci¨®n de amor y odio entre la grada y el espigado central. Y cuando m¨¢s id¨ªlico era todo y tras convertirse en el jefe de la defensa, discrepancias en su renovaci¨®n hizo que forzara su salida al Tottehnam y que volviera a ser un proscrito para la afici¨®n sevillista. Tanto es as¨ª que cuando volvi¨® cedido dos a?os despu¨¦s, Emery evit¨® alinearlo en los partidos en casa.
La eliminatoria m¨¢s atractiva de los octavos de final de la Europa League est¨¢ pre?ada de cuentas pendientes entre los contendientes.