Medio alir¨®n pidiendo la hora
El Madrid se queda a una victoria del t¨ªtulo gracias a los goles de los franceses Mendy y Benzema. Fue muy superior en la primera mitad y sufri¨® mucho en la segunda.
En el informe forense de esta Liga constar¨¢ la importancia de la ruta 66 del Madrid: Courtois, Ramos, Casemiro y Benzema. Cuatro lugares de paso obligado, m¨¢s la compa?¨ªa de un coro numeroso, para llegar hasta el t¨ªtulo. Pero ser¨¢, sobre todo, la Liga de Zidane, que casi con el mismo grupo que se despe?¨® el a?o pasado (Hazard y Militao han pasado de puntillas y Mendy ha sido intermitente) ha sabido mantener el ritmo en esta carrera de fondo que ha durado cinco estaciones (es la primera Liga con dos veranos). Al Granada lo despach¨® con un partido serio en la primera mitad y pasando las de Ca¨ªn en la segunda.
El encargo de echarle la persiana a la Liga le cay¨® a ese Madrid multimedia que Zidane se invent¨® en la Supercopa frente al Valencia con ¨¦xito de cr¨ªtica, p¨²blico y marcador. Ese partido, con los mismos cinco centrocampistas que los que aline¨® en Los C¨¢rmenes, pr¨¢cticamente todos los disponibles (James ha pedido virtualmente la cuenta), y Jovic fue la obra cumbre de un equipo que, contrariamente a su costumbre, ha sido m¨¢s roca que martillo. Luego lo repiti¨® en dos derbis ante el Atl¨¦tico, uno tambi¨¦n en Arabia y otro en el Bernab¨¦u, con una p¨¦rdida de fulgor apreciable. El plan era el abordaje de la pelota ante un adversario vigoroso y tambi¨¦n un golpe suave de tim¨®n a un equipo visiblemente m¨¢s contento con sus resultados que con su juego. Esta vez Valverde comenz¨® como interior y Modric vencido a la banda derecha.
Tambi¨¦n crey¨® Zidane que mejorar¨ªa las posibilidades de su equipo por dentro frente a este Granada el¨¢stico y abierto que defiende con cinco y le da dos papeles a Foulquier: lateral sin la pelota, viceextremo con ella. No fue ni lo uno ni lo otro. En seis minutos el Madrid aprovech¨® ese s¨ª pero no del franc¨¦s para hacer dos goles por su parcela que dieron medio carpetazo al partido y quiz¨¢ a LaLiga.
En esa espesura andaba el choque cuando Mendy, uno de los dos jugadores de campo que a¨²n no hab¨ªa marcado en el Madrid, se sac¨® un gol de la chistera. Merode¨® en el v¨¦rtice del ¨¢rea, busc¨® un apoyo que no exist¨ªa y entonces lo apost¨® todo a un esprint imposible que V¨ªctor D¨ªaz se trag¨®. Casi sin ¨¢ngulo meti¨® un zapatazo brutal por el palo de Rui Silva. Un gol de esos que siempre dejan mal al portero, pero tambi¨¦n el reconocimiento al buen ojo de Zidane con un lateral sobrado de caballos.
Y de inmediato, por esa puerta abierta de par en par, se col¨® Benzema para llegar al mismo sitio por distinto camino: recorte hacia dentro y remate colocado con la derecha. Definitivamente es el jugador de esta Liga, la filarm¨®nica del Madrid, el sexto centrocampista, el primer delantero y en los c¨®rners ajenos el quinto defensa, la versi¨®n blanca y silenciosa de Messi. Nada que ver con aquel mayordomo inconstante que durante tantos a?os sirvi¨® a Cristiano Ronaldo.
Con el partido ajardinado por sus franceses, el Madrid se sinti¨® reconfortado con ese juego de m¨¢ximo control que le dictaba su alineaci¨®n y hasta su conciencia. El territorio Isco. Un f¨²tbol de poco riesgo y poco desgaste, muy ¨²til en este rompepiernas en que se decide todo.
La reacci¨®n del equipo milagro
El Granada tir¨® de lo mejor de su repertorio, el juego a¨¦reo. Once goles de cabeza, m¨¢s que nadie en el campeonato, hab¨ªa marcado. Domingos Duarte pudo firmar el duod¨¦cimo, pero se lo sac¨® Courtois, otro de los caudillos de esta Liga. Fue un par¨¦ntesis en ese dominio sereno del Madrid, que al descanso pudo rematar la faena con otro remate del multidisciplinar Benzema rechazado por Rui Silva y en otro de Isco que tropez¨® en la zaga granadina.
Sin embargo, un error de Casemiro ante Carlos Fern¨¢ndez bien aprovechado por Mach¨ªs devolvi¨® al partido al equipo de Diego Mart¨ªnez. Ah¨ª asom¨® al energ¨ªa y el entusiasmo de un grupo que est¨¢ en m¨¢ximos hist¨®ricos y sufri¨® el Madrid. Carlos Fern¨¢ndez y Mach¨ªs, efervescente todo el partido, rozaron el empate.
Zidane entendi¨® que la f¨®rmula inicial se hab¨ªa agotado y cambi¨® el paso con dos extremos, Rodrygo y Asensio, los m¨¢s potables de los ¨²ltimos partidos. El Granada se hab¨ªa quedado ya sin lateral derecho, por la lesi¨®n de Foulquier, y hab¨ªa improvisado ah¨ª con Azeez, un mediocentro, pero sigui¨® empujando, por tierra y aire. Fueron los minutos m¨¢s descoloridos del Madrid en esta pospandemia. Courtois salv¨® un remate de Anto?¨ªn y Sergio Ramos, casi sobre la l¨ªnea, otro de Azeez. El equipo de Zidane, agobiado como nunca en los ¨²ltimos meses, acab¨® llegando a tierra. La tierra prometida. La Liga.