Pione Sisto est¨¢ de nuevo en el ojo del hurac¨¢n
Su lamentable actuaci¨®n ante el Villarreal le ubica otra vez en el punto de mira. Una p¨¦rdida suya deriv¨® en el gol del conjunto amarillo.
Despu¨¦s de ser protagonista durante el confinamiento por fugarse a Dinamarca sin permiso del club, lo que le vali¨® la multa m¨¢s alta de la historia del club, Pione Sisto recibi¨® el indulto de ?scar y goz¨® de minutos en el primer partido del reinicio de LaLiga. El internacional dan¨¦s sustituy¨® a Rafinha en el minuto 59, pero su actuaci¨®n fue un aut¨¦ntico desprop¨®sito de principio a fin, lo que acab¨® desesperando a sus propios compa?eros, quienes le llamaron la atenci¨®n en varias ocasiones por sus err¨¢ticas decisiones.
Ya en el calentamiento se pudo apreciar la desgana del extremo. Mientras Denis Su¨¢rez y Smolov, que entraron m¨¢s tarde al terreno de juego, realizaron sus ejercicios de calentamiento con total intensidad, Sisto cubr¨ªa el tr¨¢mite sin el menor inter¨¦s. No obstante, fue en el c¨¦sped cuando acab¨® con la paciencia de todos. El primer bal¨®n que toc¨® fue en la ejecuci¨®n de un saque de esquina, enviando el esf¨¦rico directamente fuera, perdiendo as¨ª una clara opci¨®n de remate.
Clasificaci¨®n | PTS | PG | PE | PP |
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El colmo de su paup¨¦rrima actuaci¨®n fueron dos infructuosos regates en una zona alejada del ¨¢rea contrario, con un evidente peligro de contra rival. As¨ª, el primer bal¨®n que perdi¨® supuso una jugada personal de Carlos Bacca que no acab¨® en gol por cent¨ªmetros. Corr¨ªa el minuto 87 y varios compa?eros le recriminaron ese riesgo innecesario. Sin embargo, no hicieron falta ni cuatro minutos para que Sisto reincidiese. Esta vez su p¨¦rdida de bal¨®n tuvo peores consecuencias, ya que la jugada acab¨® en el tanto que otorg¨® la victoria al Villarreal.
?scar intent¨® recuperar al dan¨¦s nada m¨¢s llegar y el pasado s¨¢bado decidi¨® darle una segunda oportunidad, pese a su mal comportamiento durante el confinamiento. Sin embargo, su rendimiento en el terreno de juego volvi¨® a ser decepcionante. Es posible que haya agotado definitivamente la paciencia del t¨¦cnico catal¨¢n, quien ha demostrado confiar en sus posibilidades pero tambi¨¦n le ha tratado con mano firme cuando fue necesario. Sisto est¨¢ de nuevo en el ojo del hurac¨¢n y esta vez no le ser¨¢ tan f¨¢cil salir de la tormenta.