Un final de ampliaci¨®n c¨®mico y un futuro incierto para la entidad

Esperp¨¦ntico ¨²ltimo d¨ªa de la ampliaci¨®n de capital del Real Murcia. Ese es el titular que se puede poner a lo que se vivi¨® durante el mi¨¦rcoles, donde la afici¨®n, una vez m¨¢s, se ilusion¨® con un futuro prometedor con la entrada de Alfonso Garc¨ªa y poco tiempo despu¨¦s se march¨® a dormir con rabia, viendo como la entidad sumaba un nuevo cap¨ªtulo para olvidar. Mientras, cada parte implicada se echa las culpas una a otra sin decir seguramente toda la verdad.

La jornada se iniciaba con la idea de que nada cambiar¨ªa. Se pondr¨ªa fin a la segunda ampliaci¨®n con poco menos de 800.000 euros recaudados, 1.500.000 euros por debajo del objetivo marcado. El Consejo de Administraci¨®n del Real Murcia, fiel defensor de un modelo alem¨¢n (nadie puede tener m¨¢s del 49% de las acciones), confirmaba que su idea se ven¨ªa abajo y que se presentar¨ªa una temporada igual o m¨¢s complicada que la anterior en t¨¦rminos econ¨®micos. La soluci¨®n, como apunt¨® ayer As, era la de pedir un nuevo esfuerzo a accionistas destacados como Enrique Roca y Mariano Albadalejo, entre otros.

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Todo cambi¨® horas despu¨¦s. El entorno de Alfonso Garc¨ªa, ex propietario de la UD Almer¨ªa y gran esperanza del Consejo y aficionado murcianista, comentaba en privado que el aguile?o iba a cumplir con uno de los requisitos que le exig¨ªan los actuales gestores para alcanzar su meta, entrar en el Real Murcia con plenos poderes. Garc¨ªa iba a participar en la cuarta fase de la ampliaci¨®n. Lo har¨ªa con una inversi¨®n que rondaba el medio mill¨®n, lo que le permitir¨ªa ser el accionista mayoritario. Fuentes del club confirmaban la operaci¨®n y que todo estaba a la espera de la llegada del justificante de la transferencia. El murcianismo respiraba tranquilo y ya se imaginaba el gran proyecto deportivo que se hab¨ªa vendido desde los allegados de Alfonso Garc¨ªa.

Cuando se acercaba el final del plazo, fijado a las 00:00, salt¨® la bomba. De nuevo el entorno de Garc¨ªa se pronunciaba y dec¨ªa que "por problemas bancarios no se puede hacer la transferencia ya que proviene del extranjero. Se ingresar¨¢n 300 euros de manera simb¨®lica". Desde el club no se daba cr¨¦dito, los miembros del Consejo de Administraci¨®n no pod¨ªan creerse lo que estaba sucediendo.

Pero lo peor para Francisco Tornel y los consejeros del Real Murcia estaba por llegar. Alfonso Garc¨ªa, que no hab¨ªa hecho declaraciones durante todo este tiempo, lo hizo para la Cadena SER: "Hace unos meses estuve hablando con Francisco Tornel y le manifest¨¦ la posibilidad de ayudar e incluso ser el m¨¢ximo accionista. Siempre le ped¨ª las cuentas del club para ver si yo ten¨ªa capacidad de poder sacar al Real Murcia de la situaci¨®n en la que est¨¢. Hasta ahora no me la ha dado, siempre han sido evasivas. El Real Murcia y su afici¨®n no se merecen la mala gesti¨®n y las medias verdades que se van diciendo. En ning¨²n momento he dicho que iba a poner nada (dinero) porque hasta que no tuviera las cuentas no iba a entrar. No por nada, porque yo entro o no entro, a medias tinta no lo hago. No estoy para perder el tiempo. Siempre he ido de buena fe y diciendo que necesitaba saber las necesidades de la entidad y eso hasta el momento no se me ha concedido¡±.

As¨ª se puso fin a un largo d¨ªa en el que la imagen del club se ha visto da?ada por en¨¦sima vez. Y ahora la culpa no se le puede echar a gente de fuera de la Regi¨®n, porque los actores principales de esta historia son murcianos y adem¨¢s se declaran "murcianistas".

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