Aguirre dinamiza la pizarra del Legan¨¦s para volver a LaLiga
El Vasco contin¨²a trabajando sobre el 5-3-2 que hered¨® de Pellegrino, pero tambi¨¦n ha desarrollado otras f¨®rmulas. El 4-2-3-1, seria alternativa.
El Legan¨¦s comenz¨® la temporada con una pizarra que parec¨ªa p¨¦trea. Inamovible. La pizarra de un Mauricio Pellegrino que el curso pasado abraz¨® el 5-3-2 como f¨®rmula reiterada. Tal fue su entrega al mecanismo, que dibuj¨® una plantilla sin apenas m¨¢s alternativas t¨¢cticas. De aquello ha pasado mucho. Casi un a?o. Y el Legan¨¦s de Aguirre es otra cosa. Aunque sin mimbres muy distintos. La agitaci¨®n del mercado y el devenir de la temporada (con la soga al cuello escasea el margen para experimentos) no ha permitido al Vasco gozar de muchas m¨¢s variables. Y a¨²n as¨ª, el mexicano las ha potenciado.
En la actual mini-pretemporada Aguirre ha enfatizado en f¨®rmulas de juego distintas. Tanto es as¨ª, que el jueves, en el partidillo de ¡®simulaci¨®n¡¯ que organiz¨® en Butarque, el Legan¨¦s jug¨® con dos esquemas. Por un lado, el de siempre. El que parece tatuado a fuego en el club en los ¨²ltimos a?os. El 5-3-2. Pero la otra mitad de la plantilla que sali¨® al c¨¦sped pepinero tres meses despu¨¦s de pisarlo jug¨® con un 4-2-3-1 revolucionario (no lo hab¨ªa desplegado en todo el curso) que por momento cambi¨® al 4-4-2.
| Clasificaci¨®n | PTS | PG | PE | PP |
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| Pr¨®ximos partidos |
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Parecido pero diferente a lo que sucedi¨® en Villarreal, cuando Aguirre gan¨® al Submarino Amarillo en la previa al par¨®n definitivo usando un 4-4-2 en el que ?scar era una mezcla entre delantero y mediapunta. En la primera parte sali¨® mal.
¡°Deber¨ªan habernos metido cuatro¡±, confes¨® esta semana Javier Aguirre. Pero en la segunda la f¨®rmula mejor¨® y el Legan¨¦s acab¨® d¨¢ndole la vuelta al marcador. Gan¨® 1-2 con ?scar como protagonista. M¨¢s cerca del ¨¢rea el de Los Navalmorales parece sentirse m¨¢s c¨®modo. M¨¢s agresivo.
Est¨¢ por ver que, a la vuelta, logre prolongar la racha con la que se march¨® al confinamiento. Es ¨¦sta una realidad nueva que, de abrazar ese sistema, el 4-2-3-1, ser¨¢ lo m¨¢s parecido a un dej¨¤ v¨² que ha vivido Butarque en los ¨²ltimos a?os. Porque con esa f¨®rmula Garitano logr¨® el ascenso y dos salvaciones consecutivas.
Cierto es que el de Bergara modific¨® en alg¨²n partido esa f¨®rmula para impulsarse con tres centrales, pero no era lo habitual. Un regreso al pasado para mirar al futuro. Una manera de ablandar una pizarra que ya no es tan p¨¦trea.