Braithwaite no es Boateng
"No ha venido a firmar aut¨®grafos", dicen desde Dinamarca. Consciente de que la llegada de Lautaro puede forzar su marcha, se toma las 11 jornadas como desaf¨ªos.


Alguien que menciona en su presentaci¨®n a Martin Luther King y Muhammad Ali demuestra pocos complejos. "No est¨¢ en el Bar?a para pedirle aut¨®grafos a las estrellas", dice de Martin Braithwaite, desde Dinamarca, Mikkel Nohr, director editorial de la web especializada Bold.dk. Braithwaite est¨¢ convencido de que tiene "algo diferente" que ofrecer al Bar?a y ha convertido estos meses de confinamiento y los que quedan de competici¨®n cuando se reanude LaLiga en un desaf¨ªo particular de once partidos para demostrarse que es capaz de jugar en el Bar?a. "No parece intimidado por jugar en un equipo en el que est¨¦n Griezmann, Messi o Su¨¢rez. Ya ha demostrado otras veces que es un jugador con car¨¢cter", explica Mikkel Nohr. En Dinamarca, el fen¨®meno Braithwaite se sigue con tremenda curiosidad. Quinto jugador dan¨¦s en vestir la camiseta del Bar?a, despu¨¦s de Simonsen, Laudrup, Christiansen y Ekelund, desde el pa¨ªs escandinavo est¨¢n atentos a cada movimiento del ex jugador del Legan¨¦s.
Pese a ser un futbolista desencadenado en el campo y en alguna de sus declaraciones, en las que demuestra una seguridad infinita hacia el exterior, Braithwaite tiene una mente clarividente. Sabe en qu¨¦ marco se mueve y es consciente desde que lleg¨® al Bar?a por 18 millones de euros, que su fichaje ten¨ªa el cartel de expr¨¦s y que la aventura puede acabar este mismo verano por m¨¢s que el Bar?a le pusiera 300 millones de euros de cl¨¢usula de rescisi¨®n. Braithwaite est¨¢ dispuesto a aceptar un reto cort¨ªsimo en el tiempo y del que no s¨®lo quiere disfrutar, tambi¨¦n ser part¨ªcipe. Por decirlo de alguna manera, Braithwaite no quiere ser un Boateng que firme y se conforme con un rol absolutamente intranscendente. Quiere competir por sus minutos.
Avalado por Seti¨¦n, que lo prefiri¨® antes que a Lucas P¨¦rez, Loren o ?ngel, Braithwaite es un jugador de menor rango que los tres que le preceder¨¢n en el once, pero su juego puede dar alternativas. Es entusiasta, va al espacio, puede darle piernas a un equipo viejo en cierto modo y no se arruga. En una competici¨®n que va a disputar las once jornadas que restan en poco m¨¢s de un mes, Braithwaite va a tener minutos con seguridad, Aunque sea como revulsivo. "Para cualquier dan¨¦s, jugar con el calor que hace en Espa?a en junio o julio pod¨ªa resultar un asunto complicado. Para ¨¦l no. Por su fuerza mental y porque est¨¢ en buena forma", finaliza Mikkel Nohr. Braithwaite, m¨¢s espoleado si cabe a¨²n por su despiste en el Bernab¨¦u, donde perdi¨® de vista a Vinicius en la jugada del 1-0 cuando, segundos antes, hab¨ªa tenido el gol de su vida en sus botas, tiene hambre de gloria si es que s¨®lo le quedan dos meses en el Bar?a.