El fracaso de una ampliaci¨®n de capital ¡°a medida¡±
Al momento de incertidumbre que trajo el COVID-19 hay que unir otras decisiones del Consejo grana, que limitaban la entrada de inversores y se aseguraban as¨ª su cuota de poder.
El Real Murcia ve¨ªa con optimismo la segunda ampliaci¨®n de capital. Ser¨ªa un nuevo paso para obtener dinero que ayudase a reducir deuda y crecer. As¨ª, en una rueda de prensa el pasado 13 de enero, Francisco Tornel, presidente y m¨¢ximo accionista, Daniel Moreno y Francisco Mir¨®, ambos miembros del Consejo de Administraci¨®n, defin¨ªan y aclaraban la ampliaci¨®n de capital que se iba realizar. Tornel declar¨® que era el momento de decidir entre ¡°dos modelos antag¨®nicos: que el club sea de los murcianos o dej¨¢rselo a un inversor. Hay muchos interesados en comprarlo, la entidad es una perita en dulce pero no queremos que pase como en otras ciudades como M¨¢laga o Almer¨ªa¡±, donde seg¨²n ¨¦l hab¨ªan llegado grupos con intereses econ¨®micos ajenos al f¨²tbol. Por eso apostaban por el modelo alem¨¢n, donde nadie puede tener m¨¢s del 49% de las acciones, y para el que ped¨ªan ¡°la colaboraci¨®n de los empresarios de la Regi¨®n¡±. En la misma l¨ªnea hablaba Moreno, que comentaba que ¡°si no conseguimos cinco, cuatro, tres o dos millones para lograr cierta tranquilidad econ¨®mica nos tendr¨ªamos que pensar dar el Real Murcia a un inversor. Creemos en nuestra idea, vamos a ser pioneros¡±. En estos momentos, cuando el objetivo era alcanzar 2.292.735 euros, se han conseguido ¨²nicamente 348.370 euros. Estamos dentro de la tercera fase de la ampliaci¨®n y restar¨ªa otra, pero todos aceptan que a d¨ªa de hoy esta ampliaci¨®n de capital est¨¢ siendo un fracaso.
El batacazo ha sido tal que dentro del Consejo de Administraci¨®n ya hay qui¨¦n no descarta renunciar al modelo alem¨¢n. Entre ellos Tornel, que reconoci¨® en una entrevista a As hace unas semanas que ¡°no habr¨ªa problema¡± en dar un paso atr¨¢s y buscar un inversor que se hiciese con el control del Real Murcia, aunque eso conllevase su salida del club. Tornel es realista, m¨¢s que otros miembros del Consejo y de ¨®rganos de gesti¨®n, entre ellos Daniel Moreno y Emilio Garc¨ªa, que ¡°se empe?an en seguir adelante sin tener en cuenta las graves consecuencias que eso pudiese ocasionar a la entidad¡±, como aseguraron a este medio fuentes cercanas a la misma.
La crisis provocada por el COVID-19 ha sido uno de los motivos que ha echado para atr¨¢s a empresarios y aficionados, pero no es el ¨²nico ni el principal. Hay otras razones, como el hacer una ampliaci¨®n de capital ¡°a medida¡±, plagada de limitaciones, como se quejan muchos de los que en su momento hicieron una aportaci¨®n econ¨®mica decisiva para el Real Murcia. ?stos se preguntan ¡°qu¨¦ es lo que buscaban en esta segunda ampliaci¨®n¡±. ?Inversores? S¨ª y no. Francisco Mir¨® aseguraba en dicha rueda de prensa que ¡°el Real Murcia no necesita inversores sino gestores¡±. Muchos entendieron ese mensaje como que la gente ¡°invierta pero ellos gestionan¡±. Y aqu¨ª uno de los primeros problemas. Los aficionados s¨ª pueden considerar esa opci¨®n pero empresas y particulares que estaban dispuestos a hacer un desembolso importante ¡°no quieren que otros gestionen el club con su dinero, ni est¨¢n dispuestos a no tener mayor poder de decisi¨®n, as¨ª como quieren saber qu¨¦ se hace con sus inversiones¡±. No se concibe que ¡°a d¨ªa de hoy en el Consejo, se de la circunstancia de que tiene el mismo poder de decisi¨®n una persona que aport¨® 150.000 euros en acciones que otra con 10.000 o 1.000 euros, por decir unas cifras. En el mundo empresarial es impensable¡±. Un ejemplo, el empresario Enrique Roca tiene algo m¨¢s de 220.000 euros (entre aportaciones con empresas y a t¨ªtulo personal) y es el segundo m¨¢ximo accionista del club por detr¨¢s de Tornel, pero ni siquiera es consejero ni est¨¢ dentro del ¨®rgano de gesti¨®n y ¡°mucho menos tiene capacidad para decidir¡±. La postura del Real Murcia choca con lo que, a primeros de a?o, record¨® Tornel de cuando habl¨® de sus negociaciones con la familia Samper, tras el fallecimiento de Jes¨²s Samper: ¡°Su hermano Juan Antonio cre¨ªa que los murcianos ¨¦ramos tontos, nosotros aport¨¢bamos el dinero y gestionaba ¨¦l¡±. Aquello que rechaz¨® Tornel, tiempo atr¨¢s, es lo que ahora muchos entienden que se est¨¢ haciendo.
?Por qu¨¦ no ha ido Enrique Roca a esta segunda ampliaci¨®n? El empresario lorquino tom¨® protagonismo en los ¨²ltimos meses dentro de la actualidad murcianista. Pag¨® una cantidad importante por el naming del estadio ¡°sabiendo que la rentabilidad iba a ser escasa o nula; lo hizo por ayudar al club del que es aficionado y tras una propuesta de Jos¨¦ Mar¨ªa Almela, ex presidente¡±. Seg¨²n su entorno, no fue a esta segunda ampliaci¨®n, sencillamente ¡°porque legalmente no pod¨ªa, conforme a los propios t¨¦rminos de la convocatoria de la Ampliaci¨®n de Capital, concretamente en los puntos Segundo y Tercero de la misma, en donde se detalla que ¡°no ha lugar al derecho de suscripci¨®n preferente sobre las nuevas acciones (punto segundo), y ¡°se hace previsi¨®n expresa del derecho de suscripci¨®n preferente previsto en el Art. 304 de la Ley de Sociedades de Capital, excepto para los nuevos socios que resulten de la aprobaci¨®n de la ampliaci¨®n mediante compensaci¨®n de cr¨¦ditos¡± (punto tercero). Por tanto, todos aquellos que hicieron pr¨¦stamos convertibles estaban vetados para el derecho de suscripci¨®n preferente (derecho que les hubiera permitido participar en las fases Primera y Segunda de la ampliaci¨®n de capital como socios legitimarios)¡±, como igualmente se?alaron los citados miembros del Consejo ante los medios. Sus ¨²nicas opciones ¡°estaban en la tercera y cuarta fase, pero con condicionantes: en una pod¨ªan invertir m¨¢ximo 3.050 euros y en otra hab¨ªa prima doble, es decir, si compras por valor de 400.000 euros tus acciones ser¨ªan equivalentes a invertir 200.000¡±. Esto es algo que a ninguna persona o empresa que ayud¨® con pr¨¦stamos convertibles ¡°interesaba, por eso no es que ¨¦stos no hayan querido participar, es que les resultaba legalmente imposible¡±.
El buen ambiente que se gener¨® con la primera ampliaci¨®n de capital (la relativa a los pr¨¦stamos convertibles), con considerables aportaciones de algunos empresarios, ha desaparecido. Muchos se sienten contrariados porque ¡°se les pidi¨® dinero, se les dijo que lo ver¨ªan reflejado en las futuras ampliaciones de capital y luego no fue as¨ª. Muchos hicieron un desembolso alto y les negaron su presencia en la segunda ampliaci¨®n. Fueron claves para que el Real Murcia saliese adelante y despu¨¦s no vieron reconocido su esfuerzo¡±. Les qued¨® claro cuando escucharon, sorprendidos, al consejero Daniel Moreno decir que ¡°si la Junta no aprueba la conversi¨®n de sus pr¨¦stamos en acciones habr¨¢n dado su dinero a fondo perdido. Ser¨¢n un acreedor m¨¢s de los muchos que tenemos, con las mismas dificultades para cobrar y m¨¢s si no sale adelante la segunda ampliaci¨®n¡±, lo que da idea del alto riesgo que corrieron los inversores. A ello hay que a?adir que, si bien se han convertido sus pr¨¦stamos en acciones, no han tenido ¡°derecho de suscripci¨®n preferente para participar en la posterior ampliaci¨®n de capital¡±. De esta forma se maniataba a aquellos que se hab¨ªan prestado a ayudar y quer¨ªan aumentar su presencia en el accionariado.
Hace unas semanas Tornel declar¨® en la entrevista a As que con las nuevas aportaciones de capital ¡°habr¨ªa cambios en el Consejo¡±. Y esta es una postura que ven bien aquellos que han aportado grandes cantidades econ¨®micas al Real Murcia, ¡°pero no tan bien aquellos que a d¨ªa de hoy son los que deciden¡±. Apuestan por ¡°un nuevo Consejo en el que est¨¦n representados las personas o empresas que han hecho una inversi¨®n mayor. Y cuando se haga eso, que el poder de decisi¨®n del Consejo se ejerza bajo criterios de proporcionalidad y que no sea un voto por miembro. El voto debe ser en base a su inversi¨®n. Es lo l¨®gico en el mundo de la empresa¡±.