La memorable noche de Brujas del Espanyol en Sarri¨¤
Se cumplen 32 a?os del 20 de abril de 1988, en que los pericos alcanzaban la final de la Copa UEFA tras una ¨¦pica remontada que se consum¨® en el minuto 120.
Aroma a c¨¦sped y a puro. A pipas. Y a romanticismo. El lado m¨¢s genuino del f¨²tbol se dio cita hace ahora 32 a?os, el 20 de abril de 1988, en Sarri¨¤. En una noche de nervios, de infarto y de euforia, por ese orden, que se recordar¨¢ como una de las m¨¢s bellas en la historia del estadio. Remont¨® el Espanyol contra el Brujas en el ¨²ltimo segundo del ¨²ltimo momento de la vuelta de las semifinales de la Copa UEFA. La gloria solo quedaba a un paso pero ese d¨ªa ya se toc¨® el cielo.
Hablar de justicia es err¨¢tico a sabiendas de lo que suceder¨ªa ante el Bayer Leverkusen, pero s¨ª merec¨ªa el Espanyol alcanzar esa final tras haber eliminado, entre otros, al Mil¨¢n, al Inter y al Borussia M?enchengladbach, algunos de los clubes m¨¢s potentes de Europa en aquellos finales de los 80. Sin embargo, el 6 de abril sufr¨ªa su primera derrota de toda la competici¨®n el equipo de Javier Clemente en el Olimpia Stadium belga. Un 2-0 incitaba a la ¨¦pica, a llenar Sarri¨¤ dos semanas m¨¢s tarde. Y a creer. As¨ª fue como Diego Orejuela pon¨ªa el 1-0 a los diez minutos y el 'Pipiolo' Losada igualaba la eliminatoria en el 61'. Parec¨ªa que lo m¨¢s dif¨ªcil se hab¨ªa conseguido, pero quedaba un mundo.
Y se alcanz¨® la pr¨®rroga. Y siguieron pasando los minutos hasta que la tanda de penaltis parec¨ªa inexorable. Pero lleg¨® el 120', el definitivo. Botaba Tommy N¡¯Kono, el bal¨®n le llegaba a John Lauridsen, quien prolongaba para Manolo Z¨²?iga. Resist¨ªa las acometidas de los belgas y ced¨²a a la izquierda para Miquel Soler, que enviaba una suerte de centro al ¨¢rea para que 'Pichi' Alonso, m¨¢s ?ngel que nunca, estirase el pie zurdo para anotar gol. No gol: el gol. El que met¨ªa al Espanyol en su primera final continental de una de las maneras m¨¢s heroicas posibles. 32 a?os despu¨¦s, si Sarri¨¤ pervive tan vivo en la memoria es por noches como aquella.