La odisea de viajar a China en plena crisis sanitaria
Jordi Escura, miembro del cuerpo t¨¦cnico del Qingdao Huanghai, cuenta en AS lo complicado que fue regresar a su lugar de trabajo ante la amenaza del coronavirus.
Una vez superado el pico de transmisiones de coronavirus en el pa¨ªs, China comienza a vislumbrar la vuelta a la normalidad y, por tanto, el regreso de su f¨²tbol. El goteo de jugadores y t¨¦cnicos espa?oles ya es constante, aunque viajar al gigante asi¨¢tico no est¨¢ siendo f¨¢cil. ?scar C¨¦spedes, Dani Acosta, Erica Hern¨¢ndez y Jordi Escura, miembros del cuerpo t¨¦cnico del Qingdao Huanghai que dirige Juanma Lillo, tardaron casi 48 horas en llegar a su lugar de trabajo y ahora viven su particular Gran Hermano. "Tenemos una c¨¢mara que graba nuestra puerta las 24 horas. No podemos salir hasta dentro de 14 d¨ªas", descubre Escura.
La odisea de la expedici¨®n espa?ola comenz¨® el pasado lunes en Barcelona. Su primer vuelo, a Frankfurt, sali¨® a pedir de boca: "No nos encontramos ning¨²n tipo de control". Desde Alemania viajaron a Shanghai, donde comenzaron las complicaciones: "El vuelo fue bien, pero tras aterrizar tuvimos que esperar tres horas dentro del avi¨®n. Luego tuvimos que rellenar papeles, descargarnos la app con la que controlan la enfermedad...". En total, otras tres horas que les llevaron a perder el vuelo a Qingdao. El tr¨¢fico a¨¦reo se ha reducido dr¨¢sticamente, por lo que tuvieron que esperar 13 horas hasta el siguiente avi¨®n: "Ten¨ªamos que pasar all¨ª la noche, pero no pod¨ªamos salir del aeropuerto porque eso nos habr¨ªa obligado a pasar la cuarentena en Shanghai, as¨ª que dormimos en unas sillas".
A las ocho de la ma?ana del d¨ªa siguiente, cuando la historia interminable parec¨ªa llegar a su fin, C¨¦spedes, Acosta, Hern¨¢ndez y Escura se encontraron con que en el vuelo, en el cual hab¨ªan reservado cuatro asientos, solo hab¨ªa sitio para dos personas: "Les dijimos que ten¨ªamos que ir todos y consiguieron arreglarlo. Una chica que parec¨ªa sacada de 'Encuentros de la tercera fase' nos acompa?¨® en todo momento". Ya en Qingdao, la expedici¨®n espa?ola volvi¨® a pasar los controles pertinentes. Luego un autocar los llev¨®, uno a uno, hasta la puerta de su casa. "Una persona te acompa?a hasta que entras para asegurarse de que no nos 'escapamos'". En total, casi 48 horas de viaje que pasaron "con una magdalena, un bollo, un zumo, agua y galletas saladas".
Ahora, tanto ?scar C¨¦spedes, Dani Acosta, Erica Hern¨¢ndez y Jordi Escura se encuentran vigilados las 24 horas del d¨ªa. Una c¨¢mara graba sus puertas para asegurarse de que cumplen la cuarentena. Ellos no pueden salir. Tampoco a comprar: "Cualquier cosa que quieras tienes que pedirla por internet y el portero la sube hasta la puerta de casa". Puede resultar estricto, pero es as¨ª como China ha logrado enlazar dos d¨ªas sin contagios: "No se la juegan con los que llegamos de fuera. Todos los d¨ªas vienen a tomarnos la temperatura para asegurarse de que el virus no rebota".
Obligado a dar media vuelta
Fue complicado, pero C¨¦spedes, Acosta, Hern¨¢ndez y Escura consiguieron llegar a China. Suerte que no corri¨® Roberto Mickel, miembro de la direcci¨®n deportiva del Shenzhen. El tinerfe?o viaj¨® a Barcelona, pero se vio obligado a dar la vuelta ante la imposibilidad de encontrar un vuelo seguro a su destino final. "Uno de los problemas es que compa?¨ªas como Qatar Airways o Emirates han cancelado sus vuelos desde Espa?a y esto reduce mucho la posibilidad de buscar una escala segura", asegur¨® Mickel en redes sociales.