El Almer¨ªa muestra maneras de campe¨®n

"Hemos ganado por la calidad de nuestros jugadores, pero tenemos que jugar mejor. Hemos defendido bien y tenemos jugadores que nos resuelven el partido. Si jugando as¨ª, vamos primeros; el d¨ªa que juguemos bien...". Fueron las palabras de Jos¨¦ Mar¨ªa Guti¨¦rrez tras vencer en Almendralejo. El preparador madrile?o reconoci¨® que, al igual que ante el Oviedo, los rojiblancos no sacaron su mejor versi¨®n, a la vez de la efectividad de esos jugadores decisivos. No en vano, en un somero an¨¢lisis podr¨ªa afirmarse que gran parte de los dos triunfos de la semana ya acabada se han basado en las paradas de Fernando y en el gran trabajo de Darwin N¨²?ez.?

Si en anteriores encuentros, caso del duelo en Lugo, la UDA realiz¨® un trabajo m¨¢s coral, ayer se aup¨® al liderato gracias a esos jugadores resolutivos de los que habla Guti; el mejor ejemplo, el de Darwin, quien muestra su candidatura para estar presente en Catar dentro de dos a?os. Si en cursos anteriores, a los rojiblancos les costaba horrores sacar sus encuentros adelante, teniendo que hacer todo casi perfecto, el salto de calidad tras la llegada del jeque se ha notado.?

Ahora se ve a un Almer¨ªa que suma de tres en tres aunque no tenga su mejor d¨ªa. Otrora fallos como los de Ozornwafor ayer hubiesen condenado al equipo ind¨¢lico, que frente al Extremadura demostr¨® porque est¨¢ arriba, esas maneras del campe¨®n al que no le hace falta dar el 100% para vencer. Dentro del mal encuentro que hicieron los almerienses, destaca ese aspecto camale¨®nico que volvi¨® a demostrar Guti, el cual ya no es una casualidad. Frente al Oviedo movi¨® fichas en el descanso, con un doble cambio, entrando Kaptoum y Corpas, decisivos para el resultado final. Ayer lo hizo a la hora de juego, dando entrada a Balliu y Juan Mu?oz, un Juan Mu?oz que materializ¨® el tanto final... a pase de Darwin N¨²?ez.?

As¨ª, Guti¨¦rrez ha sacado 21 unidades de 30 posibles, procedentes de seis triunfos, tres empates y una sola derrota (ante la Ponferradina), puntuando en sus cinco desplazamientos y recortando una decena de puntos al C¨¢diz (con Pedro Emanuel la diferencia entre gaditanos y almerienses lleg¨® a ser de once puntos). Lo sencillo es hablar de suerte, aunque ser¨ªa m¨¢s correcto hablar de la diferencia entre lo que fall¨® incomprensiblemente M¨²jica y lo que anot¨® Darwin N¨²?ez.