La metamorfosis deportiva de Dele Alli con Mourinho

Jose Mourinho llegaba oficialmente al Tottenham el pasado 20 de noviembre para ser el sustituto de Mauricio Pochettino en el banquillo local del nuevo White Hart Lane. Un fichaje, sin duda, medi¨¢tico, de grandes y potentes focos, que establecer¨ªa en el Norte de Londres uno de los puntos candentes para los pr¨®ximos meses.

La temporada del Tottenham no est¨¢ siendo la esperada. Tras pelear por varios t¨ªtulos el pasado curso (la Champions League, entre otros, donde quedaron subcampeones), el curso actual parece haberse traducido en un paso atr¨¢s que ha tenido las primeras consecuencias. La m¨¢s se?alada, la m¨¢s notoria, incluso la m¨¢s rotunda, el adi¨®s de Pochettino. Se marchaba el gran referente, el gu¨ªa del vestuario, el faro del proyecto. La persona de las grandes decisiones deportivas, el encargado del cambio de filosof¨ªa hace 5 a?os que supuso uno de los cambios m¨¢s significativos de la historia reciente en el club londinense.

Pero Pochettino ya es historia. Ahora, el barco est¨¢ en manos de Mourinho. Un entrenador, el portugu¨¦s, que ya empieza a ofrecer sus primeras soluciones, sus primeros cambios, su primer giro de gui¨®n respecto a lo visto en estos primeros meses de la presente temporada. Uno de ellos, casi de forma autom¨¢tica, como si de una tecla espiritual se tratara, se personifica en la figura de Dele Alli, quien parec¨ªa estar lejos de su mejor nivel, lejos de su m¨¢s determinante versi¨®n, e incluso quien se hab¨ªa convertido en el foco principal de debates en torno a si volver¨ªa a mostrarse como la estrella emergente que ha maravillado a conocidos y extra?os en a?os recientes.

Un baj¨®n deportivo que no parece haber afectado demasiado a su valor de mercado, ya que permanece en 90 millones de euros, sobre todo, por su juventud, por la calidad innata demostrada p¨²blicamente, y por ser considerado una de las grandes perlas recientes del f¨²tbol ingl¨¦s. El Real Madrid, entre otros, ha estado pendiente de su f¨²tbol en m¨¢s de una ocasi¨®n, dejando claro que se trata de un futbolista de nivel m¨¢ximo.

Dele Alli, casi por arte de magia, parece estar sufriendo una metamorfosis deportiva desde el adi¨®s de Pochettino, desde la llegada de Mourinho. Se desconoce si son motivos personales, psicol¨®gicos, o simplemente fruto de una casualidad que est¨¢ siendo analizada ya en suelo brit¨¢nico. Pero las cifras son incontestables: Dele ha vuelto, o al menos su rendimiento ha dado un vuelco notable en las ¨²ltimas dos semanas.

Su rendimiento esta temporada estaba siendo irregular. Estaba desaparecido. Nadie reconoc¨ªa a Dele Alli. Mourinho, en su llegada, incluso bromeaba con ¨¦l pregunt¨¢ndole si era ¨¦l o su hermano. Y, de repente, la explosi¨®n, la metamorfosis, la resurrecci¨®n de un futbolista que era estrella, era referente, y que parec¨ªa estar escondido en algo m¨¢s que lo puramente deportivo.

CON POCHETTINO ESTA TEMPORADA

• Particip¨® en 3 goles en 17 partidos.
• 2 goles.
• 1 asistencia.

Dele Alli parec¨ªa estar escondido, apagado, difuminado. Una situaci¨®n deportiva que parec¨ªa tener una trastienda donde ocurr¨ªan m¨¢s cosas de las com¨²nmente normales. Una jugador de su calidad t¨¦cnica no deb¨ªa sufrir un baj¨®n como el que viv¨ªa as¨ª porque s¨ª. Deb¨ªa, o parec¨ªa, haber una causalidad que explicara y diera sentido a su situaci¨®n. Lesiones, actuaciones apagadas e incluso alg¨²n rumor de futura salida del club. Algo pasaba, y ahora se acent¨²a mucho m¨¢s ese contexto tras el adi¨®s de Pochettino.

DESDE LA LLEGADA DE MOURINHO

• Ha participado en 5 goles en 4 partidos
• 4 goles
• 1 asistencia

La diferencia es clara. Muy notable. En apenas 4 partidos desde la llegada de Mourinho duplica sus cifras goleadoras (de 2 goles a 4) respecto a meses anteriores y ya suma las mismas asistencias (1). Casi duplica su participaci¨®n ofensiva (de haber participado en 3 goles a 5) en apenas 2 semanas.

En este corto periodo de tiempo ha reconvertido su imagen, vuelve a ofrecer esa versi¨®n rotunda, determinante, que provoca el olor a peligro en el ambiente, que incluso le convierte en un futbolista canalla capaz de hacer un regate inveros¨ªmil, de marcar un gol de bella factura o de provocar a un rival. Esa seguridad perdida hac¨ªa meses ha florecido de nuevo. Ese nivel que se le exige a una estrella de la Premier League est¨¢ de vuelta. Y es uno de los grandes motivos por los que la afici¨®n del Tottenham vuelve a sonre¨ªr.