El Chimy ?vila mantiene la magia de El Sadar
El estadio de Osasuna sigue invicto tras un a?o y medio. La conexi¨®n argentina con Roncaglia remont¨® el tanto inicial de Pau Torres.

Si la fe mueve monta?as, el Chimy ?vila podr¨ªa desplazar los Pirineos. Es un tipo hiperactivo, est¨¢ en todas partes y su tes¨®n casa con El Sadar como el matrimonio perfecto. El estadio mantiene su coraza, nadie puede derribar las paredes del castillo feudo m¨¢gico navarro. Van 29 partidos sin perder, a?o y medio. Su 'Comandante' argentino hundi¨® el Submarino. Fall¨® un gol cantado tras un error de juvenil de Albiol, con parad¨®n final de Asenjo, pero a este tipo si le das una segunda oportunidad mejor vete pensando en el funeral. Castig¨® la galbana del Villarreal en el segundo tiempo. Se encontr¨® ¨¦ste con un buen gol cuando la gente a¨²n se estaba acomodando, en el minuto 5, y la remontada la arranc¨® Roncaglia con zambombazo inesperado nada m¨¢s arrancar el segundo tiempo, a los 40 segundos de pitar el colegiado. El central no marcaba desde el gol con el Celta en Old Trafford en semifinales de UEFA de 2017.
Nada hac¨ªa presagiar ese desenlace, pero lo que pasa en Pamplona es fruto del embrujo de ese campo donde hasta aparecen cajas de caudales misteriosas con dinero dentro cuando tiras un tabique. Y menos tras un primer tiempo en el que el Villarreal mostr¨® su gama ofensiva, con esas veloces transiciones y la permanente b¨²squeda de su tim¨®n Cazorla. Pau Torres estren¨® feliz internacionalidad cogiendo un rechace tras falta lanzada por Cazorla. El juego a¨¦reo fue un recurso m¨¢s que interesante en centros laterales y c¨®rners, donde los rojillos eran un flan. Rub¨¦n tuvo que multiplicarse, mientras Osasuna no acababa de coger postura. Contra el talento, trataba de poner pasi¨®n.
Pero los pupilos de Arrasate encontraron un punto de inflexi¨®n. Empataron saliendo del vestuario. La conexi¨®n argentina obr¨® el milagro. El gol de Roncaglia permiti¨® creer en el triunfo siete partidos despu¨¦s. Tiraron la presi¨®n m¨¢s alta y encontraba robos, transiciones r¨¢pidas y una mejor circulaci¨®n. A su vez, generaron dudas en el Submarino, que no encontraba a sus desequilibrantes y verticales. Los locales subieron la intensidad y la l¨ªnea de presi¨®n¡ y clic, se encendi¨® la luz. Dejaron de conceder ocasiones. Chimy empez¨® a ser una absoluta pesadilla. Los mapas de calor con este hombre son incendios sobre el campo, se desplaza por los lados como si fuera en la moto de M¨¢rquez. Cuando piensa es peor. Tir¨® varias con intenci¨®n y no encontr¨® puerta, y en una que se encontr¨® se ca¨ªa y la laz¨® a ver qu¨¦ sal¨ªa. Pues la emboc¨® junto al poste de Asenjo. Calleja intent¨® frenar el vendaval con todo su arsenal: Bacca, Ontiveros, Gerard Moreno y Chukwueze, pero el equipo no ten¨ªa la energ¨ªa suficiente, parec¨ªa enfadado con el bal¨®n. Solo pudo arrodillarse ante el embrujo de El Sadar y el pico y la pala de su 'Comandante'.