Wu Lei y Campuzano reflotan a Gallego y al Espanyol en Europa
Los pericos, que suman cuatro puntos despu¨¦s de dos jornadas en la Europa League, se convierten en el primer equipo espa?ol que derrota en casa al CSKA.
EI Club Central de Deportes del Ej¨¦rcito, a ello corresponden las siglas del CSKA, conserva a¨²n entre parte del accionariado al Ministerio de Defensa ruso. Tal vez se pasen a comprar acciones del Espanyol, no por haberse convertido en el primer equipo de LaLiga que les derrota en casa, sino porque llegaba Gallego con el agua al cuello a Mosc¨² y le sali¨® de f¨¢bula el planteamiento defensivo que emple¨®. Con el gol de Wu Lei respira el t¨¦cnico y, sobre todo, emergen los pericos en la Europa League, con cuatro puntos de seis.
Ni Goncharenko ni Gallego especularon de entrada. El CSKA, con un cambio respecto al equipo que el domingo se puso l¨ªder de la Premier rusa, Bistrovic por Oblyakov. El Espanyol, con lo m¨¢s parecido a un equipo de gala bajo la idea actual del t¨¦cnico, de jugar por las bandas y no por dentro. Como si no hubiera un ma?ana, tal vez porque en caso de debacle no lo habr¨ªa. Tanto se tens¨® la cuerda que Calleri aguant¨® 22 minutos. El lado bueno lo ofreci¨® el retorno de David L¨®pez a la titularidad. Jerarqu¨ªa.
Apabullaron de entrada los moscovitas, que pusieron a prueba a Diego L¨®pez, estelar en un disparo de Vlasic. Le cost¨® a los pericos no ya tomar el control, sino trenzar cuatro pases o que uno de los balones largos los pivotaran Vargas, Wu Lei o Campuzano, cuyo fuerte no es la altura. Otro bajito, Pedrosa, protagoniz¨® la ¨²nica llegada de peligro perica en el primer tiempo, que acab¨® con un jugador de su quinta, el prometedor Chalov, asustando con un cabezazo a centro de Mario Fernandes.
M¨¢s sereno, aunque con la misma t¨®nica conservadora, se mostr¨® el Espanyol en el segundo tiempo, hasta el punto de que Akinfeev tuvo que desbaratar el 0-1 de Campuzano, a la carrera, tras un gran pase al espacio de un reactivado Vargas, que esper¨® una acci¨®n similar para repetir con Wu Lei. El chino, muy err¨¢tico hasta ese instante, meti¨® la punta de la bota para establecer el 0-1. Un hist¨®rico bot¨ªn en casa del CSKA que Mario Fernandes sin suerte trat¨® de evitar a cinco minutos del final. La guinda, de todos modos, la puso Campuzano en el ¨²ltimo suspiro, cuando buscaban la igualada los moscovitas sin demasiada eficiencia.