El Oviedo estrena el casillero de las victorias
Con un solitario gol de B¨¢rcenas en la primera parte, los asturianos se llevaron tres puntos ante un Tenerife muy espeso. Primer triunfo del equipo ovetense.
Al Real Oviedo le lleg¨® la primera alegr¨ªa del curso a costa de un Tenerife que estuvo muy espeso y no supo concretar sus ideas en el ¨¢rea rival. Un solitario tanto de B¨¢rcenas fue suficiente para llevarse los tres puntos y respirar un poco.
L¨®pez Garai decidi¨® repetir la alineaci¨®n de Lugo, mientras que Rozada s¨ª meti¨® mano en su once y le dio entrada, entre otros, al tinerfe?o Omar Ramos. El duelo empez¨® intenso y parejo, pero fue Bermejo quien primero prob¨®, pero muy desviado (5¡¯). B¨¢rcenas, a la contra, asust¨® a los locales con un disparo que se march¨® fuera (8¡¯).
Isma L¨®pez hizo escuchar el ¡®uhhhh¡¯ del grader¨ªo con un potente remate que sali¨® apenas alto (14¡¯). Mandaba el Tenerife, pero el Oviedo no se escond¨ªa y trataba de sorprender a la contra con Ortu?o u Omar. Fue el tinerfe?o quien gest¨® el 0-1 al darle un genial pase a B¨¢rcenas entre los centrales para que el paname?o defina por debajo de Ortol¨¢.
Los blanquiazules trataron de reaccionar pronto, pero les faltaba el ¨²ltimo pase para encontrar rematador dentro del ¨¢rea de Champagne. Tocaban y tocaban, pero sin profundidad. Bermejo lo intent¨® de lejos, pero fall¨® a la porter¨ªa.
Y de tanto intentarlo, lleg¨® un penalti para los locales tras un cabezazo de Borja Lasso que dio en la mano de Sangalli. Sin embargo, el colegiado no lo pit¨® ampar¨¢ndose en el VAR por fuera de juego previo de Luis P¨¦rez. De ah¨ª hasta el descanso, el Tenerife lo sigui¨® intentando, pero sin ideas claras.
A la vuelta de los vestuarios, el bal¨®n segu¨ªa siendo blanquiazul, pero sin encontrar espacios. El Oviedo, agazapado esperaba cualquier error. L¨®pez Garai movi¨® el banquillo con Nahuel y Suso buscando soluciones, aunque segu¨ªa la espesura.
El Heliodoro animaba, pero dentro del campo el equipo no terminaba de concretar sus aproximaciones ante un Oviedo bien plantado que evit¨® cualquier susto para que no se le escape la primera victoria de curso.
La recta final fue un querer y no poder del Tenerife, m¨¢s con coraz¨®n que con cabeza. Se esper¨® la heroica, en las botas de Nahuel, pero no encontraba socios para la definici¨®n.