Un Oblak con galones, a la caza de Ramallets y Vald¨¦s
El esloveno inicia la carrera hacia su quinto Zamora ya como segundo capit¨¢n. Oblak encadena dos campa?as seguidas siendo el m¨¢s regular del Atl¨¦tico.
Vuelve LaLiga y Oblak levanta el cierre en la porter¨ªa del Atl¨¦tico. No mucho, en realidad. El esloveno comienza la 2019-2020 estrenando galones como jugador franquicia rojiblanco y reci¨¦n nombrado segundo capit¨¢n. Oblak se prepara para seguir construyendo su sitio en la historia de nuestro campeonato. A sus 26 a?os, inicia su sexta temporada como rojiblanco, quinta como titular. Termin¨® las cuatro anteriores de la misma manera, como el portero menos goleado de LaLiga. Cuatro trofeos Zamora consecutivos entre una n¨®mina de mitos en la que s¨®lo dos leyendas como Ramallets y Vald¨¦s lograron el rep¨®quer. Y a por eso va Jan, pulverizando registros. Ramallets se coron¨® cinco veces jugando 288 partidos en Primera (1,24 goles por partido en contra) durante 14 temporadas con el Barcelona.
Vald¨¦s, el ¨²nico hasta hoy que gan¨® cinco Zamoras consecutivos, lo hizo en 12 temporadas y 387 partidos (0,82 goles de promedio). Oblak, por su parte, suma s¨®lo 153 partidos y ¨²nicamente 94 tantos en contra para un asombroso promedio de 0,61 goles recibidos. Aunque no son esos reconocimientos individuales los que le llenan. Sigue en el Atl¨¦tico -renov¨® al nivel del jugador mejor pagado- porque siente que en este club puede pelear por todo.
De momento, tres t¨ªtulos colectivos adornan su historial: una Europa League, una Supercopa de Europa y una Supercopa de Espa?a. Durante las dos ¨²ltimas temporadas, sin discusi¨®n, ha sido el jugador m¨¢s regular del Atl¨¦tico dejando tras de s¨ª un reguero de paradas, muchas inveros¨ªmiles, que le han asegurado puntos a su equipo. Tan decisivo como los Messi, Griezmann o Benzema pero con guantes. Oblak asume su nuevo rol. Se le ha notado desde que termin¨® sus vacaciones. Ya antes.
Al final de la pasada campa?a volvi¨® a su selecci¨®n entonando, en diversas apariciones en los medios, un discurso de responsabilidad que adivinaba lo que iba a encarnar en el Atl¨¦tico. El esloveno entiende que, tras la marcha de la vieja guardia, es su turno junto a Koke, Gim¨¦nez y Sa¨²l. Oblak es de pocas palabras, pero de los que se hace escuchar, por eso el Atl¨¦tico no porfi¨® para renovar solamente al jugador lo hizo tambi¨¦n para mantener a un l¨ªder.