Andriy Lunin, extra?a felicidad en la suplencia del Legan¨¦s
El portero cedido por el Madrid al Legan¨¦s apenas ha disputado un pu?ado escaso de partidos. Pero Lunin es feliz. Eso desliza su entorno.
Andriy Lunin no juega, pero es feliz. Su caso es curioso. El portero ucraniano, cedido por el Madrid al Legan¨¦s, apenas ha disputado un pu?ado escaso de partidos: cinco que en verdad son cuatro m¨¢s un ratito de otro en el que se lesion¨® Cu¨¦llar. A saber, 364¡¯ que suenan a bot¨ªn escaso. Pero Lunin es feliz. Eso desliza su entorno. Eso cuentan sus compa?eros.
Resulta que el chaval (20 a?os) tiene cabeza sobre los hombros y, aunque le habr¨ªa gustado participar m¨¢s (obvio), tambi¨¦n sabe que lo ten¨ªa dif¨ªcil. Que la suya no es una suplencia porque s¨ª. M¨¢s al contrario, existen argumentos s¨®lidos que entiende y, por lo que se ve, asume. El primero, el propio Pichu, que con 34 a?os ha firmado un curso excelente. Adem¨¢s, la competencia que le haya podido plantear Lunin al extreme?o ha tardado en ser seria.
Cuando aterriz¨® en Butarque en agosto, el guardameta por el que el Madrid se gast¨® 8,5 millones adolec¨ªa de conocimientos del campeonato y mostraba una clara carencia adaptativa al equipo. Estaba verde, vaya. Pero lejos de venirse abajo, el chaval hizo lo que mejor sabe: currar. Tanto, que es habitual verle echando horas extras. Tres veces por semana se queda 15-20 minutos justo tras la sesi¨®n. Varias veces al mes vuelve al c¨¦sped despu¨¦s del almuerzo para hacer carga individualizada. Rutina que repite los d¨ªas libres junto a su mejor escudero.
Joseba Ituarte, (48 a?os, Lasarte) es el preparador de porteros. Tambi¨¦n un confidente para Lunin. Algo as¨ª como un padre sobre el c¨¦sped que mima al chico mientras su verdadero padre, Oleksii Lunin, lo observa desde la grada. No se pierde ni un entreno. Ni uno solo. La relaci¨®n entre Ituarte y Lunin es muy buena y eso tambi¨¦n ayuda a que el chico se sienta c¨®modo.
Por eso en enero se qued¨® pese a que el Madrid y el Huesca hab¨ªan llegado a un acuerdo para repescarlo y mandarlo al Alcoraz. Tambi¨¦n el Lega vet¨® su adi¨®s, sabedor de que podr¨ªa necesitarlo. Como en el Wanda, donde, sancionado Cu¨¦llar, Lunin se sali¨®. No fue su primer partidazo. En diciembre, en Vallecas, incluso par¨® un penalti. El ni?o ya muestra maneras. El curso que viene todo ser¨ªa distinto. El Legan¨¦s quiere que el pr¨¦stamo se repita para cubrir la posible salida de Cu¨¦llar al Valladolid. Y entonces s¨ª, hacerle titular. Y feliz. Como es ahora, aunque no juegue.
