Aitor Fern¨¢ndez frena la reacci¨®n de la Real

Aitor Fern¨¢ndez pudo fichar por la Real Sociedad este pasado verano. Estuvo muy cerca. Tanto que solo falt¨® que Olabe se hubiera decidido. El meta de Mondrag¨®n esper¨®, pero al final no pudo rechazar el tren de Primera que le ofreci¨® el Levante. Aquel episodio de hace unos meses fue la antesala de lo que ocurri¨® en Anoeta. Porque Aitor result¨® vital en el resultado final del partido entre granotas y realistas. Empate (1-1) que realmente no sirve de mucho a ninguno, porque aumentan su mala racha sin ganar y no les acerca a sus objetivos, pero que deja un sabor de boca muy diferente a ambos. Porque la sensaci¨®n es que el Levante rescata un punto de oro, y que la Real lo deja escapar cuando lo acariciaba al hacer m¨¢s m¨¦ritos, pero no convertirlos en goles. Y de eso tiene toda la culpa Aitor Fern¨¢ndez, que quiz¨¢ haya hecho su particular venganza por no apostar m¨¢s en las oficinas de Anoeta por su fichaje, cuando no dej¨® de proclamar a los cuatro vientos su cari?o Txuri-Urdin. No fue a la Real, visit¨® Anoeta por primera vez en su carrera, y fren¨® en seco la reacci¨®n realista y dio un punto que sabe a gloria al Levante, que supo sobreponerse a una mala primera parte para arreglarla con una mejor¨ªa ostensible tras el descanso. Y la Real sigue estancada sin poder rematar sus buenas intenciones, porque arriba le falta pegada, con Sandro totalmente impotente y Bautista err¨¢tico en los minutos que tuvo. Januzaj dur¨® media parte y Oyarzabal s¨®lo no puedo tirar del carro. Menci¨®n aparte el debut del chaval Guevara, que tuvo una tarjeta de presentaci¨®n en Primera notable. Es el octavo chaval de Zubieta que debuta en la m¨¢xima categor¨ªa esta temporada.

Como si quisiera desquitarse r¨¢pidamente de la pesada losa que han supuesto durante la semana los 25 minutos de infausto recuerdo del Pizju¨¢n, los jugadores de la Real salieron con una marcha m¨¢s que los del Levante, con ese punto de intensidad que te da la rabia de saber que fallaste y debes enmendar el error. Es verdad que las ocasiones tardaron en llegar, pero tambi¨¦n es cierto que el dominio territorial y de la pelota era exclusivamente Txuri-Urdin, mientras los granotas se limitaban a estar bien puestos con su defensa de tres jugadores y carrileros largos.

La presi¨®n alta granota dificultaba la salida de bal¨®n c¨®moda de la Real, pero esta vez Sandro s¨ª supo explorar la espalda de la defensa rival y aprovechar su velocidad para provocar la incertidumbre en el Levante, que por momentos dudaba de si ir arriba o esperar replegado, porque con espacios la Real le empezaba a hacer da?o. Bien dirigida por el debutante Ander Guevara, cuyo aplomo y dotes de mando eran insultantes, como si llevara toda la vida en Primera; con Merino esta vez jugando con criterio entre l¨ªneas; y Oyarzabal y especialmente Januzaj haciendo da?o por las bandas. El gol empez¨® a ronda el ¨¢rea de Aitor Fern¨¢ndez, ese portero de Mondrag¨®n que quiso la Real en verano pero que acab¨® en el Levante. Sandro no paraba de intentarlo, pero su punter¨ªa segu¨ªa desviada, y el que apareci¨® fue Theo para llegar desde atr¨¢s con potencia y poner un centro raso medido al segundo palo para que fusilara a la red Januzaj. El gol hac¨ªa justicia a las intenciones de cada equipo. Porque hasta esa media hora de juego el Levante no hab¨ªa despertado. Un par de carreras de Morales, y poco m¨¢s. Paco L¨®pez pidi¨® que adelantaran l¨ªneas y crearon m¨¢s dificultades a una Real, que a la contra amenazaba con aumentar su renta. No lo aprovech¨®, y lleg¨® con esa m¨ªnima ventaja al descanso.

Tras el descanso el guion pareci¨® seguir el mismo camino, pero la Real con el paso de los minutos ya no apretaba tanto, ten¨ªa menos energ¨ªa y no se acercaba con tanto peligro a la porter¨ªa de Aitor. El Levante reordenaban sus ideas y empezaba a hacer da?o a la contra. Los realistas llevaban el peso del partido, pero la sensaci¨®n de que el Levante jugaba con la incertidumbre del exiguo marcador, como si estuviera convencido de que iba a tener la opci¨®n de meterse en el partido y que solo ten¨ªa que aprov¨¦chala. Mientras Januzaj era parado con constantes faltas y casi desaparec¨ªa en combate acus¨¢ndolo en exceso la Rea; Oyarzabal, Sandro y Bautista no eran capaces de ampliar el marcador, algo que daba esperanzas a un Levante muy ordenado. Y como en el f¨²tbol hay una maxima que dice que el perdona lo acaba pagando, eso le paso al equipo donostiarra, y de eso se aprovech¨® el Levante. Casi en su ¨²nica ocasi¨®n clara en todo el partido, pusieron en liza una jugada ensayada que pill¨® fuera de juego a la defensa realista, Campa?a sac¨® raso al primer palo y Luna machac¨® por bajo a Rulli. Reaccionaron los donostiarras a las desesperada, espoleados por un gran Oyarzabal, pero se toparon con un inspirad¨ªsimo Aitor, que salv¨® al Levante y se reivindic¨® en la casa del equipo del que es aficionado toda su familia y por el que pudo fichar en verano.

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