CARABAO CUP | CHELSEA 0 (3)-CITY 0 (4)
El City gana la Carabao Cup en los penaltis al Chelsea
No hubo goles tras 120 minutos de final. Los fallos de Jorginho y David Luiz le dieron el t¨ªtulo a los p¨²pilos del Pep Guardiola. Kepa y Sarri, protagonistas.
El City se lleva una final en horizontal. El d¨ªa que se invente ese deporte en el que una serie de personas se pasen un bal¨®n y no haya porter¨ªas que obliguen a romper la maravillosa sinfon¨ªa de las posesiones sin fin, hay entrenadores que se lo van a pasar bomba. Hasta entonces el f¨²tbol es, con sus numerosos defectos, de todo menos lo que se vio en Wembley en la final de la Copa de la Liga inglesa. Al menos en cuanto a ocasiones se refiere, porque entre Chelsea y Manchester City solo sumaron tres disparos a puerta en 120 minutos de final, un dato demasiado alarmante cuando hablamos de los dos ¨²ltimos campeones de Premier League.
El trofeo se lo llev¨® eso s¨ª el Manchester City en los penaltis gracias a Ederson, que detuvo dos penaltis a Jorginho y David Luiz en sus dos ¨²nicas intervenciones de todo el partido. Pep mantiene as¨ª su idilio con las finales, ha ganado once de las ¨²ltimas doce, y pone una piedra m¨¢s en su proyecto deportivo con los citizens.
Eso s¨ª, cuando los equipos de Sarri y Guardiola entran en ese estado de posesi¨®n infinita en que no se acercan a porter¨ªa, los partidos pueden terminar haci¨¦ndosele bola hasta al aficionado m¨¢s entregado. M¨¢s de 20 minutos tard¨® el Manchester City en efectuar el primer disparo del encuentro, y ni siquiera fue entre los tres palos, para lo que hubo que esperar hasta la media hora de juego.
El Chelsea aguantaba bien el dominio del City, que apenas lograba acercarse con peligro a la porter¨ªa de Kepa, pero sin jugadores como Higua¨ªn o Hudson-Odoi le costaba un mundo llegar a crear algo arriba. Sorprendi¨® que, para el que pod¨ªa ser su ¨²ltimo partido, Sarri escogiese la f¨®rmula de Hazard como falso '9', el esquema que utiliz¨® durante los partidos que terminaron conden¨¢ndole porque nunca lleg¨® a funcionarle del todo.
Ya en la segunda mitad ambos equipos se dieron cuenta de que ten¨ªan que acelerar un poco su f¨²tbol, aunque solo fuera una pizca, si quer¨ªan llevarse la final. El ¨¢rbitro anul¨® un gol a Ag¨¹ero por fuera de juego que el VAR confirm¨® poco despu¨¦s. Estaba muy justo el argentino, casi en l¨ªnea con el pie de R¨¹diger, pero lo estaba, y eso fue pr¨¢cticamente todo en los segundos 45 minutos.
Corr¨ªa el minuto 80 y para el Chelsea, que no hab¨ªa disparado una sola vez a puerta en todo el partido y que no lo har¨ªa hasta el 92, la mejor noticia fue la entrada de Hudson-Odoi, que fue recibido con un rugido atronador de los suyos. El aficionado del City tampoco estaba viviendo un carrusel de emociones hasta ese momento, ya que solo hab¨ªa visto a Kepa atajar un ¨²nico disparo sin peligro.
Durante la pr¨®rroga las constantes interrupciones por las molestias f¨ªsicas de Kepa terminaron decidiendo a Sarri a meter a Willy Caballero, un experto adem¨¢s en los penaltis, pero cuando se iba a producir el cambio se produjo una situaci¨®n surrealista en Wembley cuando el portero espa?ol se neg¨® a abandonar el campo entre aspavientos que terminaron cancelando la sustituci¨®n. El t¨¦cnico italiano, loco de rabia, no cab¨ªa en s¨ª del enfado con su guardameta. Al final Kepa conseguir¨ªa detenerle un penalti a San¨¦, pero los fallos de Jorginho y David Luiz terminaron d¨¢ndole el trofeo a los citizens.