Al Ghandour no convenci¨® a sus 'v¨ªctimas' 16 a?os despu¨¦s
Han pasado tres lustros largos desde ese infausto d¨ªa y las heridas siguen abiertas. El colegiado regres¨® por donde vino sin el olvido ni el perd¨®n de Morientes, Hierro, Contreras...
La herida sigue abierta. Lo ha demostrado Antoni Daimiel con su fabuloso documental sobre Al Ghandour. #Vamos trajo a Espa?a al ¨¢rbitro de los cuartos del Mundial 2002 contra Corea del Sur y le puso frente a sus v¨ªctimas, los jugadores de la Selecci¨®n de Camacho. "Si le vi¨¦ramos por la calle, todav¨ªa alguno le dar¨ªa una colleja", dijo Mendieta quien, quince a?os despu¨¦s, sigue calificando aquel arbitraje como "el robo del siglo". "Es un poco sinverg¨¹enza", dijo Nadal del ¨¢rbitro. "Al Ghandour no fue profesional", a¨²n lamenta Morientes.
El colegiado egipcio acept¨® la invitaci¨®n de Daimiel para venir a Espa?a a rodar el programa Los Otros "con la sana intenci¨®n de aclarar las cosas". Pero regresa como vino, como enemigo p¨²blico N¨²mero 1. "Yo tengo la conciencia tranquila porque los errores fueron de mis ayudantes, por ejemplo en el gol de Morientes la pelota no sale. Con el VAR no hubiera pasado", se justifica Al Ghandour. Sergio Gonz¨¢lez, hoy entrenador del Valladolid, no traga: "No me valen las explicaciones de Al Ghandour. Los errores de tus auxiliares son tus errores".
Cuenta Al Ghandour que ya le dio las explicaciones a uno de los pesos pesados de la Selecci¨®n, Hierro, con quien coincidi¨® hace a?os en Qatar. Pero Hierro, consultado por este peri¨®dico, prefiere olvidar. "He visto el reportaje, s¨ª. Pero paso. No tengo nada que decir. Es agua pasada. Me ofrecieron participar en el programa y dije que no", cuenta el que fuera capit¨¢n de la Selecci¨®n. El seleccionador en el Mundial 2002 era Jos¨¦ Antonio Camacho, que cuando vio que sus jugadores celebraban la eliminaci¨®n de Italia por Corea se oli¨® la tostada. "?Pero qu¨¦ celebr¨¢is? Si le hacen esto a Italia que son campeones del Mundo, ?qu¨¦ nos har¨¢n a nosotros". Lo cierto es que un peri¨®dico italiano, Il Corriere dello Sport, public¨® hace cuatro a?os que en el Mundial 2002 la FIFA hizo lo necesario para favorecer a los anfitriones, Corea y Jap¨®n. Para el diario romano, en el Mundial 2002 "hubo un complot".
Esa tesis es la que barruntan los protagonistas de aquel d¨ªa. "En el vestuario, al final, se habl¨® de las cosas raras que pasaron. Nunca viv¨ª errores tan clamorosos", cuenta Albert Luque. Tambi¨¦n Contreras, para quien la jornada fue "impotencia, angustia, tristeza e injusticia".