REAL MADRID 1-RAYO VALLECANO 0
Ni Isco ni reconciliaci¨®n
Solari no dio ni un minuto al malague?o. El Madrid gan¨® con un gol de Benzema pero aburri¨®. Courtois salv¨® el empate en el descuento. Benzema se fue lesionado. Pit¨® el Bernab¨¦u.
Si se trataba de ganar y llegar al Mundial de Clubes de buen humor, cumpli¨® su misi¨®n sin esmero el Madrid. Si se trataba de hacer las paces con el p¨²blico, se qued¨® a un mundo. No jug¨® Isco, por costumbre, porque es mejor poner a enfriar ese plato y porque a Solari tampoco le apetece disimular que es farolillo rojo. S¨ª lo hizo Asensio, otro al borde de la ruptura con el Bernab¨¦u. Perdi¨® dos goles, aunque escuch¨® m¨¢s aplausos que pitos. Se march¨® tocado en un tobillo Benzema, asunto que dispara la m¨¢xima alerta en la situaci¨®n actual. Y Courtois evit¨® el empate en el descuento. Su hero¨ªsmo deja al Madrid en cueros. El Rayo se corrigi¨® mucho atr¨¢s, pero sin De Tom¨¢s no tuvo u?as ni dientes.
Son tantos los antecedentes que incriminan a Benzema que ahora, en su mejor momento desde que lleg¨® al Madrid, pasa un mes sin marcar y se le abre ficha policial. Pero ante el Rayo le quit¨® el precinto al partido en un cl¨¢sico del Madrid: marcar antes de jugar. Fue un gol estupendo y capic¨²a: el franc¨¦s marc¨® el camino con un cambio de juego y remat¨® la faena tras env¨ªo de Lucas V¨¢zquez, a quien Solari privilegia ya sin disimulo.
Ese gol en medio de un partido adormilado sac¨® al madridismo de su mal humor. Un partido en el que no comenz¨® Isco y s¨ª Marco Asensio, sobre el que se investiga en qu¨¦ momento y circunstancias perdi¨® su condici¨®n de pr¨ªncipe heredero.
El Rayo hab¨ªa salido encogido, con Embarba de nueve, una defensa casi de cinco y groseros desajustes en su l¨ªnea de fuera de juego que le costaron ese gol y un mano a mano de Asensio que invalid¨® un pie de Dimitrievski. En su favor declararon un cabezazo de Vel¨¢zquez que se fue por mil¨ªmetros y un corte providencial de Llorente, que volvi¨® a proclamar que el Madrid no puede salir a la calle sin guardaespaldas.
Courtois, otra vez h¨¦roe
Con todo, el equipo de Solari no acaba de poner la casa en orden. Modric ense?¨® su Bal¨®n de Oro en los proleg¨®menos y a la gente le pareci¨® un suceso lejan¨ªsimo, porque el jugador que lo gan¨® lleva meses sin justificarlo m¨¢s all¨¢ de algunos detalles. Uno dej¨® ante el Rayo, mal abrochado por Asensio. Mejor anduvo Kroos, con m¨¢s empuje y un buen zurdazo al palo. Pero todo en un clima fr¨ªo que hizo que el p¨²blico no le diera importancia al partido y tampoco el Madrid, al que se le ped¨ªa m¨¢s nervio para amigarse con la grada. El Rayo se fue al descanso correcto pero sin rebeld¨ªa. Corri¨® mucho tras el bal¨®n y casi nada con ¨¦l.
Despu¨¦s le puso m¨¢s pimienta a la presi¨®n durante un rato, pero el vetado De Tom¨¢s es infanter¨ªa, caballer¨ªa y artiller¨ªa en el equipo. Michel puso a Beb¨¦, un futbolista con m¨¢s remate que participaci¨®n, y dej¨® un zapatazo sin colocaci¨®n que rechaz¨® Courtois. Y despu¨¦s a ?lex Alegr¨ªa, el ¨²nico nueve que le quedaba. Dos pasos adelante de Michel y un paso atr¨¢s del Madrid con Ceballos por Asensio. Quedaba la sensaci¨®n de que hab¨ªa dejado llegar demasiado lejos al Rayo por falta de contundencia arriba. Eso queda de los tiempos de Lopetegui. Luego se lesion¨® Benzema y entr¨® Vinicius, al que los accidentes y las fobias de Solari acercan mucho a la titularidad. Y el Rayo, en el descuento, tuvo por dos veces el empate. Lo evit¨® Courtois en un Bernab¨¦u al borde del ataque de nervios.