Diakhaby evita el liderato del Sevilla pero no la bronca
El jugador franc谷s marc車 de cabeza en el descuento. El Sevilla ya acariciaba el triunfo y el liderato tras un gol de Sarabia. Pa?olada en Mestalla.

Diakhaby evit車 en el descuento la quinta derrota del Valencia y de paso que el Sevilla se colocara l赤der de la Liga. A迆n as赤, pese a ese gol in extremis del central, Mestalla dedic車 una bronca sonora a los suyos, que siguen lejos de donde debieran y a los que el gol de Sarabia hab赤a puesto contra las cuerdas. En verdad el reparto de puntos fue justo, aunque en el minuto en el que lleg車 pareciera m芍s premio para unos y castigo para otros.
El partido fue de los que dan valor a?adido a LaLiga. Bravo, tenso y no exento de calidad. El Valencia puso pundonor; el Sevilla, constancia, solvencia. Mach赤n levant車 un muro en Mestalla que r赤ete t迆 del de Juego de Tronos. Con Promes, Mercado, Kjaer, G車mez y Escudero en l赤nea; con Banega, Sarabia y V芍zquez por delante de ellos. Por suerte para sus hijos los Reyes Magos llegan en nada, porque sus padres regalan poco. Y las pocas veces que los che pudieron llegar antes que cualquiera de ellos al remate, apareci車 Vaclik, sobre todo con dos paradas seguidas a Garay y Mina de las que dan y quitan puntos. Ni tan siquiera el gol de Diakhaby puede verse como error de la zaga, porque el franc谷s entr車 con todo.
La estrategia de Mach赤n hac赤a fuertes a los suyos atr芍s, aunque ofensivamente poco peligro crearon hasta el descanso. Y no se piensen que el Valencia, por m芍s veces que se diera contra el muro, cej車 en su empe?o de hacer gol. Su pena es que a Guedes le faltaba esa chispa para irse por velocidad y que cada vez que Carlos Soler o Rodrigo quer赤an encarar se ve赤an en una encerrona. Los sevillistas ocupaban bien los espacios, siempre con superioridad por dentro y tambi谷n por fuera, y por m芍s que Coquelin y Parejo hicieran un m芍ster de espeleolog赤a, con Wass y Gay角 subiendo y bajando, la grieta en la zaga hispalense no aparec赤a.
Mach赤n, tipo listo, se percat車 que Gay角 defend赤a por 谷l y por Guedes. Y tras el descanso, por ese lado, por el de Promes y Sarabia, fue por el que el Sevilla fue saliendo de la cueva. El partido ya no era el mismo. Al Valencia, todo sea dicho, le ha mirado un tuerto o le debe dinero a alguno, porque casi de la nada le hicieron el gol. Un mal remate de Ben Yedder acab車 en los pies de Sarabia y este no lo perdon車. El Sevilla ten赤a al Valencia donde quer赤a y los de Marcelino, a la grada impaciente. Ol赤a m芍s que a la contra los hispalenses mandar赤an a la enfermer赤a a los blanquinegros que a remontada y puerta grande para ellos.
Marcelino movi車 ficha pero no el tablero: defensa por defensa (por lesi車n de Gabriel Paulista), extremo por extremo, delantero por delantero. Banega lanz車 un aviso que impact車 en el palo, como tambi谷n despu谷s se cruz車 dicho elemento en el camino de Sarabia. El Sevilla no mataba el partido y acab車 pag芍ndolo. Mestalla guardaba silencio de velatorio, de esos en los que no se grita pero s赤 se cuchichea y rara vez para hablar bien de alguien. La bronca se dejaba para el final. Y quiz芍s porque estuvieran predispuestos o simplemente porque a ver si as赤 espabilan los suyos, ni el gol de Diakhaby sobre la bocina evit車 la pa?olada. Pero s赤 la derrota del Valencia y el liderato del Sevilla.
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