Elizegi decide no presentarse: "No se dan las circunstancias"
"Seguir¨¦ apoyado como un aficionado m¨¢s", promete. Las cuentas frenan al cocinero. Tras caerse Jainaga, Aldazabal y Corres, sigue sin aparecer un candidato. Hoy se abre el plazo para presentar opciones a la sucesi¨®n de Urrutia.
Aitor Elizegi?da un paso a un lado y ha decidido no presentarse a las elecciones a la presidencia del Athletic. Ha ido madurando su proyecto, ya ten¨ªa casi todos los perfiles, pero finalmente arroja la toalla. Quer¨ªa anunciar esta semana sus intenciones, pero despu¨¦s de hacer cuentas, no lo ve claro. Ha analizado a conciencia los estatutos del club y ha contactado con la LFP para abundar en la letra peque?a, y algo no le cuadra.?Afirma tener la solvencia econ¨®mica necesaria para conseguir los avales pero en su primer a?o de gesti¨®n, caso de acceder al cargo y tener que acometer algunas operaciones, estar¨ªa atado de pies y manos, porque la ley marca que se ejecutar¨ªa el patrimonio propio si el curso es deficitario.?La p¨¦sima situaci¨®n deportiva, con el equipo en el fondo de la tabla en zona de descenso, tampoco ayuda. Por ¨²ltimo, los?80 millones de masa salarial, insostenibles para un equipo alejado de Europa varios a?os, es un ancla absoluta, y no digamos ya si hay que buscar refuerzos que parecen imposibles. El margen de maniobra ah¨ª es tendente a cero.
Por lo tanto, el club vuelve al punto cero: a menos de un mes para las posibles elecciones, no hay candidatos. Se han ido cayendo Jainaga, Elizegi y dos posibles miembros de la ¨²ltima directiva (Aldazabal y Corres). Uribe-Echevarr¨ªa, otro de los reciente dirigentes, tampoco est¨¢ por la labor. Enormes sombras sobre el futuro de la entidad. El conocido cocinero trataba de desbloquear el fondo habilitado de 76 millones para posibles ejercicios futuros deficitarios (no puede echar mano de ¨¦l reci¨¦n llegados). LaLiga ten¨ªa la ¨²ltima palabra sobre los avales (de 20 millones, que se ejecutar¨ªan por delante de la famosa hucha) y la recolecci¨®n de firmas tampoco iba a ser un problema. Al final hay unas trabas econ¨®micas que resultan un muro para el equipo de Elizegi.