Un empate y dos rehabilitados
Demb谷le entr車 en el 79', igual車 en el 89' el gol de Costa y mantiene el liderato para el Bar?a tras un partido de pizarra y voltaje. Sergi Roberto se lesion車.
Oblak golpeaba el c谷sped con los pu?os cuando el asistente iba a levantar el cartel車n del descuento. Entre las piernas Demb谷l谷 acababa de colarle un bal車n que era el empate, que arrebataba eso que el Atleti abraz車, dormir l赤der. Doce minutos lo hizo, lo fue, pero en ese 89' el bal車n de Demb谷l谷 entre sus piernas devolv赤a las tablas al marcador y dejaba en nada el regresar a la furia y el gol de Diego Costa.
Hora y media antes, sonaba todav赤a el Thunderstruck cuando el Metropolitano fue desenredando su grito, un gui?o al pasado, a ese himno del primer Metropolitano, "eres de Espa?a aureola y del f迆tbol el coloso", entre los colores de la bandera de Espa?a y los rojiblancos del coraz車n. Sali車 el Atleti a esperar en su campo, sin riesgos. Tampoco los tendr赤a un Barcelona en el que Valverde ciment車 el centro del campo, con Semedo en el lateral para adelantar a Sergi Roberto y con la siderurgia de Vidal. La electricidad del aire era contenci車n sobre el c谷sped, s車lo rota cuando el bal車n rondaba las cercan赤as de Ter Stegen. Ah赤 el Atleti sub赤a el ritmo, se lanzaba feroz a intentar robar un bal車n; lo dem芍s todo era freno.
El Bar?a ten赤a el bal車n esperando a Messi y el Atleti, los espacios, con el verde del Metropolitano convertido en tablero de ajedrez. Partido de t芍ctica y pizarras, la orden era no perder un bal車n y sobre ella se jugaba. Si Griezmann, que salud車 con besos y abrazos a esos que estuvieron a punto de ser compa?eros, Su芍rez, Messi, sin reproches, lograba sacar una falta que Koke envi車 a las manos de Ter Stegen, cuando Messi ten赤a la pelota intentaba que pasara algo, pero nada terminaba de pasar.
Los dos mejores porteros del mundo no ten赤an trabajo. El 4-4-2 de Valverde no terminaba de rodar, Su芍rez ca赤a demasiado en banda, sin nadie que acompa?ara, y el Atleti lanzaba el juego por la banda de Filipe pero sin llegada, faltaba el enganche con Costa. Las pinceladas las pon赤a Busquets, c車modo en su partido 500 con la azulgrana, sombrero a Rodrigo, ca?o a Costa. Lemar estaba en todas y no daba una.
Y as赤 segu赤a el partido, un pasar de minutos entre dos equipos que jugaban a no perder m芍s que a ganar, todos los hombres en veinte metros. Un bocadillo de puntas en salsa de cemento. Un horror a los ojos. Tan lejos de las expectativas que el d赤a, el liderato y la derrota del Madrid le hab赤an colgado.
Porque Su芍rez no es Messi con el bal車n en los pies y el Atleti segu赤a sin lograr pisar el 芍rea de Ter Stegen y en la grada hac赤a fr赤o y nada en la hierba invitaba al calor. Ni Messi en los libres directos, todos demasiado altos. Como si no fuera Messi quien los lanzara. En las botas de Piqu谷 estuvo la mejor ocasi車n antes de que Sergi Roberto se lesionara y el 芍rbitro pitara descanso: un intento de despeje que estren車 los guantes de Ter Stegen en esta noche, hasta el momento, de combate nulo.
Mismo plan en la segunda parte
El partido regres車 como si el descanso no hubiera pasado. Mismo juego y aburrimiento: Bar?a con bal車n, Atleti sin presi車n. Fue despu谷s de una p谷rdida inexplicable de Rodrigo (bal車n regalado a Vidal por el que hasta Griezmann le abronc車), que el Bar?a subi車 una marcha. Comenz車 a mover la pelota m芍s r芍pido, a jugar un paso adelante, rondando la frontal. Pero Messi no terminaba de ser Messi y en el 芍rea contraria Costa erraba la que era, hasta el momento, la 迆nica ocasi車n de su equipo. Griezmann le roba el bal車n a Arthur y corre imparable, con su capa, la banda. Al llegar a la l赤nea de fondo, gira el cuello y le ve, que viene, pero no llega al pase de la muerte. Se entromete Piqu谷, el de Lagarto estuvo lento pero entonces tuvo un roce con Umtiti y de 谷ste emergi車 el Costa de siempre, el del fuego camina conmigo.
El Atleti buscaba su partido en el bal車n parado, arma cholista, y Costa lo ejecut車. Fue despu谷s de una falta lanzada por Koke que peg車 a Vidal en el brazo pero el VAR no consider車 penalti. Lleg車 de c車rner. Lanz車 Grizi y el de Lagarto cabece車 ante un Ter Stegen de trapo. La furia volv赤a a ser el goool en su boca, su golpeo en el pecho: hoy sal赤a de cuentas, nueve meses despu谷s un gol en Liga. Dos minutos despu谷s se ir赤a, tocado, pero dejando al Atleti l赤der.
El Bar?a se lanz車 a por el partido y encontr車 a Demb谷l谷: suyo fue el gol en el 89', diez minutos llevaba en el campo. Su zurdazo pas車 entre todas las piernas antes de colarse entre las de Oblak, s車lo Lucas estuvo a punto de frenarlo. 1-1. El asistente alz車 el cartel車n de descuento: cuatro minutos. Todos se jugaron con la impaciencia del tiempo perdido y el tono de los Atleti-Bar?a de antes. Idas, vueltas, pulsaciones. Pero los dos equipos llegaban demasiado tarde a esa frase de T. S. Eliot, "solo aquellos que arriesgan ir demasiado lejos pueden encontrar lo lejos que pueden llegar". El empate hab赤a sido el partido y en empate se qued車.
