Roberto Fresnedoso, apadrin¨® a la Pe?a Arenas Valdeolivas
Ocurri¨® este fin de semana, en el tercer aniversario de esta pe?a que tambi¨¦n han apadrinado tambi¨¦n Gabi o Tiago. As tambi¨¦n presente en la celebraci¨®n.
Hab¨ªa cambiado el sal¨®n, en esta ocasi¨®n el Bodeg¨®n, m¨¢s recogido, m¨¢s familiar, la esencia segu¨ªa la misma. La pe?a Arenas Valdeolivas soplaba sus velas con la emoci¨®n de los dos a?os anteriores. Son tres ya y acompa?ados todos por padrinos de lujo: Gabi, Adelardo y Caminero en su primer aniversario, Tiago en el segundo y Roberto Fresnedoso en el tercero, en esta ocasi¨®n. Uno m¨¢s en la ceremonia y en los recuerdos, de los buenos, el doblete, y de los menos buenos, bajar al Infierno. Acompa?ado de su familia, no dej¨® de pintar su nombre en camisetas. Su discurso fue uno de los momentos de la noche en la que tambi¨¦n estuvo As: Patricia Caz¨®n dirigi¨® el cumplea?os.??
Roberto agradeci¨® la invitaci¨®n y desvel¨® un pensamiento: ve al Atl¨¦tico con posibilidades de Liga. Como aquella vez, la suya, la de 1995-96. Pedro Delicado, profesor de lengua y literatura y presidente de la pe?a aplaud¨ªa emocionado, justo despu¨¦s le tocar¨ªa hablar a ¨¦l. Y eran muchas cosas las que ten¨ªa apuntadas en su lista. Todos los viajes al Metropolitano, los que ha habido en el a?o y los que est¨¢n por venir, las acciones, las noches rojiblancas. La agrupaci¨®n, con m¨¢s 260 socios, es ya un referente en esta localidad abulense, abrazada por el Valle del Ti¨¦tar y la Sierra de Gredos.?
Marisol es su socia n¨²mero 1, por ese sentimiento rojiblanco que siempre lleva en la piel ("siempre, siempre llevo algo", aduce mientras en su mu?eca brilla el escudo en la pulsera del reloj) y porque su padre, Abelardo, fue el presidente de la primera pe?a del Atl¨¦tico que hubo en la localidad, la Valdeolivas. Despu¨¦s de un partido ella siempre acude al cementerio, para contarle c¨®mo qued¨® el Atleti sobre esa tumba con el escudo del Atl¨¦tico Aviaci¨®n. En el ¨²ltimo a?o tambi¨¦n lo hace para cont¨¢rselo a su madre. La del s¨¢bado era noche dif¨ªcil, el primer aniversario de la pe?a sin ella: no dej¨® de recibir el cari?o de todos los socios, se la quiere, mucho. Mientras, Inma iba repartiendo boletos para la rifa. Hab¨ªa mucho que repartir. Bufandas, camisetas firmadas, caracoles, cestas de frutas y lo m¨¢s preciado: asientos del Calder¨®n.?
Si la noche la abrieron el discurso del alcalde de la localidad Juan Carlos S¨¢nchez Mes¨®n y el homenaje de la pe?a a la campeona de Arenas en bicicleta de monta?a, Mar¨ªa, que no pod¨ªa acudir por competir en Valencia y una grave lesi¨®n el d¨ªa anterior, rodilla, ligamentos, ¨¦sta la cerr¨® una rifa sorpresa: la de dos entradas para acudir al Metropolitano para el Atl¨¦tico-Espanyol, la despedida de Gabi. Subi¨® alto el himno del Atl¨¦tico cuando uno de los ni?os a la cena se hizo con ellas. El tercer aniversario terminaba, Roberto segu¨ªa firmado, todo seguir¨ªa en el Merrick, pub del vicepresidente de la pe?a, Carlos D¨ªaz-Infantes, un apellido muy rojiblanco: es el de uno de los preparadores f¨ªsicos del Atl¨¦tico durante a?os, hasta el pasado, que inici¨® su camino por separado, en el Ludogorest, dejando lejos a sus chicas, Matilde, su mujer, y su hija Adriana, y su tierra, ¨¦sta, Arenas.?
