Tres espa?oles, entre los m¨¢s valiosos del Sudeste Asi¨¢tico
Javier Pati?o, ?lvaro Silva y Natxo Insa est¨¢n entre los 10 jugadores del Sudeste Asi¨¢tico con mayor valor de mercado.
Hay muchas variantes que determinan cu¨¢l es el valor real de un futbolista: olfato goleador, capacidad de liderazgo, disposici¨®n para sobreponerse a situaciones adversas¡ El mercado fluct¨²a seg¨²n el rendimiento de los jugadores, y seg¨²n los datos de Transfermarkt hay tres espa?oles que destacan por encima del resto en el Sudeste Asi¨¢tico.
Javier Pati?o, ?lvaro Silva y Natxo Insa, con un valor de mercado de 500.000, 800.000 y 800.000 euros respectivamente, son los tres hombres nacidos en nuestras fronteras que destacan por su rendimiento en Asia. Todos tienen doble nacionalidad: los dos primeros son internacionales con Filipinas y el tercero viste la camiseta de Malasia desde el pasado mes de marzo. Es precisamente esto lo que les permite formar parte de un listado en la que tan solo tienen cabida los jugadores comunitarios.
Javier Pati?o, madrile?o de nacimiento pero internacional con Filipinas debido a su ascendencia, jug¨® en varios clubes espa?oles hasta que en 2013 dio el salto a Asia, donde ha vestido las camisetas de Buriram United (Tailandia), con el que ha ganado tres ligas, y Henan Jianye (China). ?lvaro Silva tambi¨¦n es internacional por Filipinas. En 2012 cambi¨® el Xerez por el Petrolul de Ruman¨ªa, aunque no fue hasta 2014 cuando inici¨® su etapa asi¨¢tica. Desde entonces ha jugado en Al-Qadisiya (Kuwait), Daejeon Citizen (Corea del Sur), Hanoi (Vietnam) y actualmente milita en el Kedah malayo. Menos recorrido tiene Natxo Insa, que tan solo ha vestido la camiseta de Johor desde que en 2017 dej¨® el Levante para jugar en Malasia. El de Cocentaina, sin embargo, suma ya cuatro t¨ªtulos con los tigres del sur.
Completan la lista de jugadores m¨¢s valiosos del Sudeste Asi¨¢tico el indonesio Stefano Lilipaly, los tailandeses Chanathip Songkrasin, Kawin Thamsatchanan, Theerathon Bunmathan y Teerasil Dangda y los filipinos Daisuke Sato y Neil Etheridge.