Demichelis cuenta sus 45 d¨ªas en el Atl¨¦tico y lo dif¨ªcil que fue pedirle al Cholo su salida
El central argentino desvela c¨®mo fueron las semanas en Madrid y c¨®mo tuvo que convencer al Cholo para que le dejara ir al City.
Martin Demichelis lleg¨® al Atl¨¦tico de Madrid en el verano de 2013, pero inesperadamente sali¨® al mes y medio debido una oferta del Manchester City. Fue una operaci¨®n que caus¨® mucho revuelo porque el central llegaba al club rojiblanco de la mano de su compatriota Diego Pablo Simeone tras una gran temporada en el M¨¢laga. ¡°Cuando se desbarranc¨® el M¨¢laga en 2013 y se cay¨® la posibilidad de volver a River, el Cholo me invit¨® a sumarme al Atleti. Hice la pretemporada y faltando 15 d¨ªas para cerrar el mercado, el City contact¨® para ver qu¨¦ opciones hab¨ªa de salir. Me ped¨ªa Pellegrini, que ya me tuvo en River y M¨¢laga. Entren¨¦ con muchas ganas y viv¨ª 45 d¨ªas muy intensos en Madrid. El Cholo as¨ª te los transmite, con un cuerpo t¨¦cnico que roza la excelencia¡±, cuenta el central a La Naci¨®n.
Pero Demichelis se entera pronto que un puesto de titular en el eje de la zaga estaba muy caro por culpa de Miranda y God¨ªn. Y en el City, baj¨® el paraguas de Pellegrini, todo pod¨ªa iba a ser m¨¢s f¨¢cil el a?o previo al Mundial de Brasil. ¡°No me ausent¨¦ ni un solo entrenamiento. El Cholo estaba supercontento conmigo, pero arrancaba detr¨¢s de Miranda y God¨ªn. Si iba a la Premier y demostraba estar bien en una liga con delanteros gigantes, tendr¨ªa m¨¢s opciones de llegar al Mundial. Y eso pas¨®: en el City fui titular, campe¨®n, jugu¨¦ muy bien y fui al Mundial¡±.
La situaci¨®n para Demichelis no era f¨¢cil. Deb¨ªa pedirle a la persona que confi¨® en ¨¦l que se quer¨ªa ir a los pocos d¨ªas de llegar. Y encima ante el Cholo y el Mono Burgos, dos personas pasionales y con car¨¢cter. ¡°El presidente no quer¨ªa negociar, as¨ª que tuve que encarar al Cholo. Dif¨ªcil, con todo lo que te impone. Era el arranque de la temporada y jug¨¢bamos la Supercopa con el Barcelona. Era imposible hablarle, pero se cerraba el mercado de fichajes, as¨ª que le ped¨ª una reuni¨®n. Nos encerramos el Cholo y el Mono Burgos en el vestuario, tras el 1-1 dela ida, y nos dijimos lo que hab¨ªa que decirse. Al Cholo no le gust¨® porque hab¨ªa apostado por m¨ª¡±.
El tiempo ha sanado la herida y ambos recuperaron la cordialidad. ¡°Al tiempo nos cruzamos en los pasillos de La Rosaleda y nos dimos un abrazo. Y luego en alg¨²n avi¨®n nos vimos y lo mismo¡±
