Los males del Villarreal y la confianza en Calleja

Punter¨ªa

El Villarreal es, con 173 remates, el tercer equipo que m¨¢s remata de la liga, solo por detr¨¢s de Barcelona y Real Madrid. Adem¨¢s con 51 remates entre los tres palos, es el quinto equipo que m¨¢s remata, pero uno de los que menos acierta. Y es que de esos 51 remates, solo nueve han sido gol, lo que arroja la necesidad de rematar m¨¢s de cinco veces a puerta para marcar y 19 remates en total para lograr un gol.

Sin l¨ªder

Un mal que viene castigando al equipo desde hace tiempo. Las lesiones y la no continuidad de algunos jugadores de peso o veteranos como Bruno, Fuego, Bacca o Bonera, dejan al equipo sin un jugador de ese perfil. La opci¨®n de Cazorla y de que este pueda tener esos galones, parece ser una de las que maneja Calleja.

Lesiones

La baja de Bruno es un lastre deportivo y mental, su ausencia hace que el equipo no pueda contar con un jugador vital por juego y experiencia, lo que sin duda hace las cosas m¨¢s complicadas. La baja de Javi Fuego que no puede ayudar con su experiencia; la de Bonera que deja la defensa sin efectivos; o la de Bacca cuando m¨¢s gol se necesita son un lastre.

El recuerdo del curso 2011-12

Otra de las cosas que est¨¢n afectando al equipo es el reiterado recuerdo de lo que sucedi¨® en la temporada 2011-12, en la que el equipo se vino abajo y descendi¨®, siendo un equipo Champions. Ese recuerdo y la sensaci¨®n de que es una situaci¨®n muy parecida castiga a la grada, lo que genera nervios.

Ansiedad

Desde hace unas semanas el equipo castellonense ha perdido confianza y la seguridad en el campo, mostr¨¢ndose como un equipo endeble al que cualquier jugada lo acaba castigando. Esos servicio se est¨¢n haciendo mucho m¨¢s evidentes en los ¨²ltimos partidos, en los que ya se nota en varios de los jugadores habituales.

El sistema

Uno de los problemas que ven¨ªa teniendo el equipo era el sistema o la idea de juego, ya que con el rombo el equipo se ve¨ªa vulnerable. Ese es un problema superado, ya que Calleja ha decidido cambiar la idea y el sistema, alternando el 4-2-3-1 y 4-4-2. El t¨¦cnico decidi¨® recuperar el doble pivote, con el que equilibrar al equipo y darle m¨¢s consistencia al engranaje defensivo.

Confianza en el t¨¦cnico

A pesar del mal arranque, el club sigue manteniendo su confianza en Calleja, algo que otras veces no ha sucedido. La grada pide cambios y de no haberlos genera desconfianza y m¨¢s cr¨ªtica, algo que no ayuda a la tranquilidad. Pero por otro lado es verdad que la confianza del club en el t¨¦cnico demue +stra un refuerzo que pocas veces se ven en nuestra Liga, a pesar de ser una decisi¨®n controvertida.