Laudrup ha dicho no al Madrid
Hay nerviosismo en los despachos del Bernab¨¦u porque tras la destituci¨®n de Lopetegui y la dificultad con Conte no se encuentra sustituto.
Se viven horas de nerviosismo absoluto en los despachos del Bernab¨¦u. La situaci¨®n deportiva est¨¢ a la deriva de manera inesperada y los tel¨¦fonos echan humo intentando buscar una soluci¨®n de urgencia y garant¨ªa a la vez. Era Conte el elegido para sustituir a Lopetegui, pero lo dicho por Ramos tras el Cl¨¢sico (¡°el respeto no se impone, se gana¡±) ha echado para atr¨¢s al italiano, cuyas pretensiones econ¨®micas (en cuanto a la duraci¨®n de su contrato) tampoco casan con los deseos de la entidad blanca. Y en esa encrucijada est¨¢ Florentino, con Solari como interino y buscando entrenador¡
Seg¨²n ha podido saber AS, el entorno de Michael Laudrup, ahora sin equipo, ha sido sondeado. Pero Laudrup ha dicho que ¡°no¡±. Lleva al Madrid en el coraz¨®n, seg¨²n afirman a este peri¨®dico personas muy cercanas a ¨¦l, pero no le convence la situaci¨®n deportiva ni las perspectivas de futuro. As quiso contrastar la noticia con su representante, Bayram Tutumlu, que fue tajante: ¡°Laudrup no busca una oportunidad para entrenar al Madrid, sino una situaci¨®n ideal para hacerlo. Tal y como est¨¢ siendo llevado ahora el Madrid no es el momento. No quiere entrar ah¨ª de cualquier manera¡±. Incluso una persona muy cercana al mito del f¨²tbol dan¨¦s afirm¨® a este peri¨®dico que el t¨¦cnico ha llegado a calificar la situaci¨®n actual, en lo deportivo, de la entidad, de "ruinosa".
Laudrup era una de las opciones preferidas por Florentino despu¨¦s de que Conte se haya puesto dif¨ªcil. Tiene el dan¨¦s un aura parecida a la de Zidane, de gran jugador del pasado que puede ganarse el respeto de un vestuario, y lo ve¨ªa como el escudo perfecto para capear el temporal. Pero Laudrup, ¡°que estar¨ªa encantado en entrenar al Madrid en un futuro¡±, seg¨²n Tutumlu, su representante, quiere un proyecto estable y de futuro. ¡°Est¨¢ enamorado del Madrid¡±, dice Tutumlu. Pero, al parecer, la inestabilidad de la pol¨ªtica deportiva le echa para atr¨¢s.
