ATL?TICO
Villarreal-Atl¨¦tico: una relaci¨®n tortuosa pero amigable en los negocios
Forl¨¢n, God¨ªn, Vietto, Rodrigo... Ahora el Villarreal se queja de que el Atl¨¦tico le quit¨® un juvenil, Valera, en una nueva disputa entre ambos clubes.
Las relaciones entre Villarreal y Atl¨¦tico de Madrid no han sido nunca las m¨¢s cordiales, aunque esto no haya impedido que los clubes se entendieran a la hora de hacer negocios con los fichajes. Pero nunca existi¨® una relaci¨®n especialmente amistosa entre los dirigentes de ambos clubes, quiz¨¢ porque Villarreal y Atl¨¦tico han protagonizado partidos calientes en las ¨²ltimas temporadas. El Villarreal le dej¨® al Atl¨¦tico sin ir a Europa en agosto de 2004 al imponerse en la Intertoto, en una etapa en la que el equipo rojiblanco empezaba a despertarse del mal sue?o que hab¨ªa supuesto su descenso. Ir a Europa supon¨ªa una buena ayuda econ¨®mica para un club que poco se parece al de ahora.
En el lado contrario estuvo el gol de Falcao, en la temporada 2011-12, que mand¨® al Villarreal a Segunda Divisi¨®n. El Atl¨¦tico visit¨® el estadio de su rival en la ¨²ltima jornada liguera habi¨¦ndose proclamado campe¨®n de la Europa League, pero eso no import¨® para vencer con gol del colombiano y hacer que el Villarreal descendiera. Ese tanto no se olvida en el ahora estadio de La Cer¨¢mica.
Como tampoco olvidan all¨ª el gol del rojiblanco Eller en la campa?a 2006-07, con Guille Franco tirado en el suelo. Hubo mucha tensi¨®n en la grada, en el terreno de juego y en el palco. Pellegrini y Javier Aguirre eran los entrenadores. L¨¢zaro Albarrac¨ªn, vicepresidente del Atl¨¦tico, y entonces la persona que representaba al club madrile?o por toda Espa?a, denunci¨® que le hab¨ªan llamado sinverg¨¹enza en el palco de autoridades. Albarrac¨ªn, de talante siempre cordial y con amigos en todos los clubes, sali¨® indignado del estadio del Villarreal. El viaje, no obstante, hab¨ªa comenzado mal, pues en la previa del partido el Atl¨¦tico no pudo desplazarse porque estall¨® un motor en el avi¨®n que deb¨ªa trasladar al equipo a tierras castellonenses. Incluso en el traslado el mismo d¨ªa del encuentro el Atl¨¦tico volvi¨® a tener problemas a la hora de salir en el avi¨®n.
En esos a?os el Villarreal se codeaba con los grandes, jugaba la Champions, y le comi¨® a clubes como Atl¨¦tico y Valencia parte de cuota de mercado como tercer equipo del pa¨ªs. Quiz¨¢ para recuperar el tiempo perdido el Atl¨¦tico tuvo que fichar y hacerlo bien. Y en el Villarreal encontr¨® jugadores como en pocos sitios. Vinieron Forl¨¢n y God¨ªn, dos grandes del Atl¨¦tico, y m¨¢s tarde Vietto, quien no cuaj¨®. Esta temporada recal¨® en la entidad del Wanda Metropolitano Rodrigo. El centrocampista se form¨® en las categor¨ªas inferiores del Atl¨¦tico. No supieron ver su potencial, le dejaron escapar porque era peque?o y no se le ve¨ªa futuro. El Villarreal estuvo listo (hay una cosa que en el Atl¨¦tico reconocen abiertamente: la manera de trabajar del Villarreal con el f¨²tbol base) y all¨ª se hizo un nombre, un jugador de presente y de futuro. El viaje de vuelta estaba cantado, aunque el Atl¨¦tico tuvo que soltar una millonada.
Ahora el Villarreal se queja de que el Atl¨¦tico le quit¨® un juvenil, (el Atleti argumenta que quedaba libre) en una nueva disputa entre ambos clubes, en una relaci¨®n dif¨ªcil, a veces complicada, aunque nunca lleg¨® a quebrarse del todo. No habr¨¢ comida oficial y el Atl¨¦tico visitar¨¢ un estadio donde lo pasa realmente mal. Muy mal. S¨®lo en el Camp Nou vive peores momentos. Ser¨¢ un episodio m¨¢s de los calientes Villarreal-Atl¨¦tico.
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