"Los jugadores quer¨ªamos seguir negociando y fue la DBU la que no quiso. Quisimos prolongar el actual acuerdo y jugar en condiciones serias, pero volvi¨® a decir que no. No se trata de dinero, sino de derechos", se?al¨® en un comunicado la estrella danesa del Tottenham, Christian Eriksen.
El acuerdo reci¨¦n caducado, firmado en 2015, provoc¨® un conflicto en el pasado entre las dos partes por diferencia de interpretaci¨®n, que acab¨® con una sentencia del Tribunal de Arbitraje que oblig¨® a la federaci¨®n a pagar 3 millones de coronas (unos 400.000 euros).
La DBU ya se vio inmersa en un conflicto similar un a?o atr¨¢s con la selecci¨®n femenina, aunque este centrado en una reivindicaci¨®n salarial, que provoc¨® la suspensi¨®n de un amistoso y no presentarse a un partido de clasificaci¨®n contra Suecia, lo que fue castigado con una sanci¨®n por la UEFA.