Mbapp¨¦ se ha puesto casi imposible: es un bien de Estado
Su condici¨®n de h¨¦roe nacional le ata a¨²n m¨¢s al PSG y a Francia. Se extiende y comercializa el lema: ¡°Libert¨¦, ?galit¨¦, Mbapp¨¦¡±. Su figura puede ayudar a un estir¨®n de licencias.
Alrededor de 90.000 franceses forman parte de la Legi¨®n de Honor, la m¨¢s alta distinci¨®n que otorga el Estado, instaurada por Napole¨®n en 1802. Tambi¨¦n lo ser¨¢n en semanas los jugadores de la selecci¨®n francesa campeona del mundo y su bandera, Kylian Mbapp¨¦, cuya salida del Par¨ªs Saint Germain camino del Madrid se antoja ahora imposible. El club franc¨¦s, que fich¨® al jugador disfrazando la operaci¨®n con una cesi¨®n con opci¨®n de compra obligatoria por 180 millones para sortear el fair play financiero, entiende que su permanencia resulta estrat¨¦gica no s¨®lo por su rendimiento deportivo sino tambi¨¦n porque vincula definitivamente al Emirato de Qatar, propietario del club, con el Estado franc¨¦s.
Mbapp¨¦, de 19 a?os, se convirti¨® el domingo en el segundo jugador m¨¢s joven en marcar en la final de un Mundial. ¡°Si Kylian sigue igualando mis r¨¦cords voy a tener que calzarme las botas otra vez¡±, ironiz¨® O Rei, que mantiene a duras penas su registro de 1958.
En Mbapp¨¦ ha visto una gran oportunidad de promoci¨®n el f¨²tbol franc¨¦s. Horas despu¨¦s del triunfo en Mosc¨², mientras se rebautizaban ef¨ªmeramente estaciones del metro de Par¨ªs con nombres de algunos de los h¨¦roes, se popularizaron camisetas con la leyenda: ¡°Libert¨¦, ?galit¨¦, Mbapp¨¦¡±. En cierto modo, Mbapp¨¦ actualiza el s¨ªmbolo de la Francia multirracial de la que presume el presidente Macron y que ya fue promocionada por Chirac, que en 1998 tambi¨¦n concedi¨® la Legi¨®n de Honor a los campeones.
En un art¨ªculo publicado ayer mismo por el New York Times se consideraba al jugador ¡°puro producto de esa migraci¨®n que tantos europeos desprecian o combaten. Los 16 africanos o hijos de africanos que integran esta selecci¨®n son el resultado m¨¢s exitoso de ese movimiento¡±.
S¨ªmbolo de la Francia multirracial
Mbapp¨¦ naci¨® en Bondy, un suburbio a 10 kil¨®metros de Par¨ªs. Hijo de un entrenador camerun¨¦s y de una jugadora de balonmano de origen argelino, a¨²n se conservan im¨¢genes de su cuarto de adolescente empapelado con fotograf¨ªas de Cristiano Ronaldo y junto a una maqueta del estadio Santiago Bernab¨¦u. Incluso lleg¨® a visitar Valdebebas y a fotografiarse junto a Zidane. Pero su padre decidi¨® que era demasiado pronto para abandonar Francia. Hoy su fichaje por el Madrid est¨¢ muy lejano. ¡°Me quedo al 100%¡±, le dijo a la SER en la zona mixta del estadio Luzhniki.
L¡¯Equipe ya manejaba ayer su nombre como favorito a la conquista del Bal¨®n de Oro junto a Griezmann. Ahora le necesitan el PSG y Francia. El triunfo del 98 provoc¨® un crecimiento descomunal en licencias futbol¨ªsticas: 200.000. Desde 2000 la cifra est¨¢ estancada en 2,2 millones, pero se espera ahora un nuevo estir¨®n con Mbapp¨¦ como gancho.
Tambi¨¦n la Liga francesa lo considera figura troncal. ¡°Los futbolistas franceses han aumentado mucho su valor pero no juegan aqu¨ª. Y la diferencia con LaLiga o la Premier es enorme¡±, advierte Wladimir Andreff, profesor em¨¦rito de la Sorbona y presidente del Consejo Cient¨ªfico del Observatorio de la Econom¨ªa del Deporte. Y en ese intento de promoci¨®n interna resulta crucial Mbapp¨¦, al que Le Parisien incluy¨® ¡°en el pante¨®n del f¨²tbol franc¨¦s: est¨¢ en condiciones de traer a casa una tercera estrella en 2022, 2026 o 2030¡±. ¡°Puede llegar al potencial de Messi o Cristiano¡±, augura el exinternacional Malouda. Y para desdicha del Madrid, el PSG quiere estar ah¨ª para verlo.