¡°Desde Johan Cruyff, la idea es tener el bal¨®n para jugar y disfrutar. ?l nos instruy¨® en desterrar esa vieja idea de que hab¨ªa que morir en el campo¡±. Bajo ese mantra, que ha convertido al estilo azulgrana en una referencia mundial desde hace a?os, emprendi¨® Joan Vil¨¤, director de metodolog¨ªa del Barcelona, una did¨¢ctica y provechosa conferencia este domingo en Cornell¨¤-El Prat, enmarcada en el FootballAim Congress. ¡°Hemos querido trabajar por nuestros sue?os y hemos conseguido cosas¡±, se arranc¨® Vil¨¤, quien enumer¨® los fundamentos del cambio con una completa analog¨ªa: ¡°Empezamos por cambiar la terminolog¨ªa de guerra del f¨²tbol. Se habla de atacar y defender, de destruir y ganar, y no somos soldados. Nosotros hablamos de fase de posesi¨®n, de tener el bal¨®n y construir, del proceso y de disfrutar¡±. Y prosigui¨®: ¡°No hablamos de tiros o golpeo, porque t¨² golpeas a tu enemigo, y el bal¨®n es tu amigo. No queremos robar el bal¨®n, no somos ladrones, queremos recuperarlo¡±. Y a¨²n deshoj¨® el responsable azulgrana m¨¢s trampas del lenguaje: ¡°No hablamos de lucha, batalla, duelo: es una competici¨®n, un partido. No hablamos de utilizar nuestras armas, sino de conceptos. ?Hay que ser m¨¢s agresivos? ?D¨®nde est¨¢ el l¨ªmite entre agresividad y violencia? Y no hablamos de enemigo, sino de rival¡±, especific¨®. Con la relaci¨®n entre jugador y bal¨®n como el fundamento de todo el juego azulgrana, recalc¨® el director de metodolog¨ªa del Barcelona que ¡°el equipo que tiene el bal¨®n es el due?o del juego . Con bal¨®n, todos disfrutamos. Sin ¨¦l, solo corremos. Por eso, nuestro juego se basa en no perder el bal¨®n ni la posici¨®n en el campo. El bal¨®n es nuestro tesoro¡±, enfatiz¨®. Por eso, asever¨® Vil¨¤ que le ¡°cuesta creer que muchos jugadores piensen que la conducci¨®n es mejor que el pase. Es un desgaste, riesgo de lesi¨®n y miras menos a tu entorno. El bal¨®n siempre corre m¨¢s que el jugador¡±. Por ello, puso en valor la ¡°capacidad socioafectiva¡± (las relaciones entre jugadores) y dedic¨® buena parte de su exposici¨®n al hilo conductor de todo el juego: ¡°Decir pase es decir f¨²tbol¡±. Vil¨¤, no en vano, fundament¨® el ¨¦xito del Bar?a en el derribo de tab¨²s. ¡°Se suele emplear el objeto fijo para hablar de f¨²tbol . Decimos que vamos a atacar una porter¨ªa. Pero todo cambia cuando te refieres a los elementos m¨®viles: el bal¨®n, los compa?eros, los rivales. El f¨²tbol es el juego m¨¢s complejo, pero tambi¨¦n el m¨¢s bonito¡±, destac¨®.
Y abund¨®: ¡°En el f¨²tbol tradicional, hablamos de atacar y defender, y de una transici¨®n. Pero todo esto parte el juego, lo especializa entre defensores y atacantes. Nosotros hablamos de jugar al f¨²tbol, de fase de posesi¨®n, de disponer del bal¨®n o recuperarlo¡±. ¡°As¨ª lo que logramos¡±, aclar¨®, ¡°es globalizar y unir el juego, no separarlo. Cada situaci¨®n de juego est¨¢ relacionada con algo que ha ocurrido o va a suceder, no son jugadas sino que el f¨²tbol es complejo. No hablamos de l¨ªneas ni de sistemas de juego, porque cuando corre el bal¨®n desaparecen¡±, asegur¨®. Por ello, y situando en la pantalla nombres como Messi o Iniesta, no es de extra?ar que sentenciara: ¡°Hay jugadores que deber¨ªan ser eternos, porque han dado sentido a todo este proceso¡±. Y concluy¨®: ¡°Si cuidamos al jugador y al bal¨®n, tenemos f¨²tbol¡±.