En el extenso curr¨ªculo de partidos importantes en la carrera de Messi, el de hoy ante Nigeria merece al menos un lugar entre los diez primeros (sigue el partido en directo en As.com). Argentina y Messi se la juegan a todo o nada, a vida o muerte, en un duelo que deben ganar para seguir su curso en el Mundial. Lo que parec¨ªa destinado a ser el Mundial de Messi, por madurez y porque se le espera en un gran torneo con su selecci¨®n, se ha convertido en una pesadilla absoluta.

El 10 no tiene acompa?antes como los del Bar?a, cierto, pero tampoco ¨¦l est¨¢ sabiendo rebelarse ante la adversidad. Al contrario, su apat¨ªa ante Croacia ha desquiciado a muchos. Ning¨²n jugador de campo que disputara los 90 minutos en este Mundial corri¨® menos que Messi ese d¨ªa. Esto contrasta con la adrenalina que transmit¨ªa -y transmite- Maradona, que con su show habitual de testiculina se?ala a¨²n m¨¢s desde la grada a Messi en cada partido que juega Argentina.

Pero la Albiceleste a¨²n tiene un hilo de esperanza. La victoria de Nigeria ante Islandia le abre una puerta que no exist¨ªa de ninguna manera. Con ganar a los nigerianos y que Croacia no pierda podr¨¢ obtener una clasificaci¨®n sufrida, muy a la italiana.

El polvor¨ªn que ahora mismo es la AFA no ayuda a la misi¨®n. Filtraciones de audios, reuniones de jugadores, posibles motines y una figura muy deteriorada de Sampaoli dibujan un escenario poco propicio. El ¨²ltimo rumor es que los futbolistas han tomado el mando y el once ser¨¢ el que m¨¢s les guste a ellos.

En medio de este revuelo, Nigeria se presenta como un hueso duro de roer. Ya gole¨® a Argentina en un amistoso hace meses y tiene a Musa como principal pu?al. Hasta ahora los nigerianos han ganado el Mundial de la moda (su camiseta ha revolucionado el mercado), pero hoy pueden dar un golpe a la historia. La historia de Messi, que juega contra los africanos y contra s¨ª mismo, el Messi de Argentina, el de las decepciones y los fracasos.