Lo que no sab¨ªas de Rodrygo: f¨²tbol sala, sextete en un duelo...
El nuevo fichaje del Madrid ha vivido una carrera marcada por la precocidad. Es el jugador brasile?o m¨¢s joven de la historia en marcar un gol en la Libertadores.
Siguiendo el paso de Pel¨¦, Robinho y Neymar, ahora Rodrygo Silva de Goes es el nuevo diamante del Santos brasile?o, un joven extremo de tan solo 17 a?os que ya ha roto varios r¨¦cords de precocidad y que este viernes certific¨® su fichaje por el Real Madrid por una millonada.
Nacido en Osasco, en el estado de Sao Paulo, Rodrygo lleg¨® al Santos en 2011, tras un breve y fugaz paso por la base del Sao Paulo, pero se incorpor¨® al equipo de f¨²tbol sala, en el que tambi¨¦n se form¨® la estrella del Par¨ªs Saint-Germain y de la Canarinha. Fue en esa disciplina en la que empez¨® a destacar y a marcar goles con una facilidad pasmosa.
La precocidad marca su vida desde el inicio. A los ocho meses comenz¨® a andar y chutar a la bola, seg¨²n afirm¨® en una entrevista, y a los once a?os ya era objeto de entrevistas en la televisi¨®n nacional y consigui¨® el apoyo de la empresa estadounidense Nike.
Su familia tambi¨¦n creci¨® con el f¨²tbol, pues su padre, Eric Goes, fue lateral derecho en varios clubes brasile?os como Oeste, Linense, Mirassol, Crici¨²ma, Cear¨¢ y Guarani hasta que a los 32 a?os decidi¨® colgar las botas para centrarse en la carrera de su hijo, al que tuvo con 16 a?os. "Yo juego mejor que ¨¦l", bromeaba entonces Rodrygo.
La evoluci¨®n de Rodrygo fue mete¨®rica en las bases del Santos. En el Campeonato Paulista Sub'17 lleg¨® a marcar seis goles en un partido, lo que le vali¨® para ganarse un lugar en la selecci¨®n brasile?a de su categor¨ªa.
El debut con el primer equipo lleg¨® el 4 de noviembre de 2017 con todav¨ªa 16 a?os y a los cinco meses ya era titular indiscutible en las alineaciones del t¨¦cnico Jair Ventura, que le dio libertad sobre el c¨¦sped partiendo desde la izquierda.
En otro r¨¦cord m¨¢s, el atacante se convirti¨®, a los 17 a?os, en el jugador brasile?o m¨¢s joven de la historia en marcar un gol en la Copa Libertadores, la competici¨®n de clubes m¨¢s importante de Am¨¦rica.
Sus tantos -es el actual m¨¢ximo goleador del Santos en la liga brasile?a- y regates pronto cruzaron fronteras y empezaron a retumbar en los despachos de los clubes m¨¢s potentes del f¨²tbol europeo.?Liverpool, Barcelona, Borussia Dortmund, Bayern M¨²nich, Par¨ªs Saint-Germain y Real Madrid se interesaron por el chaval, seg¨²n public¨® la prensa brasile?a.
Al final, el nuevo 'menino' de Vila Belmiro firm¨® por el Real Madrid en una operaci¨®n que se estima que se cerr¨® en unos 45 millones de euros, la misma cifra que pag¨® el a?o pasado el club blanco por otra de las perlas brasile?as, Vinicius Junior, del Flamengo.
El Real Madrid pagar¨¢ un poco menos de lo estipulado en la cl¨¢usula de rescisi¨®n (50 millones de euros) y dejar¨¢ al delantero en el Santos hasta julio del pr¨®ximo a?o, cuando ya habr¨¢ alcanzado la mayor¨ªa de edad.
Se trata del fichaje de mayor valor jam¨¢s negociado por el Santos, mucho m¨¢s de lo que percibi¨® por el fichaje de Neymar, cuyo traspaso al Barcelona est¨¢ a¨²n en los tribunales espa?oles por sospechas de fraude.
"Santos agradece la postura y el profesionalismo del Real Madrid en todo el proceso, as¨ª como a la familia y a los representantes del jugador que buscaron una negociaci¨®n transparente y muy buena para todas las partes", indic¨® el club brasile?o en un comunicado oficial.
Durante las negociaciones, que se prolongaron varias semanas, Rodrygo quiso mantenerse al margen y dej¨® su futuro en manos de sus padres y empresarios.?"No s¨¦ nada en relaci¨®n a eso. Yo estoy centrado en el Santos, voy a continuar haciendo mi trabajo aqu¨ª. En este momento, solo pienso en el Santos", dijo en una rueda de prensa el pasado 5 de junio.
De complexi¨®n delgada y algo m¨¢s de 1,70 metros de altura, Rodrygo fue educado para mantener siempre un perfil humilde, tanto es as¨ª que su madre, Denise, le colg¨® en la puerta de su cuarto cuando era peque?o una serie de 'mandamientos' de comportamiento.
Entre ellos, "prohibido creerse mejor que los compa?eros" (con la palabra 'mejor' escrita en rojo) y "dejar al ¨¢rbitro pitar al sufrir una falta".
Su ambici¨®n no tiene l¨ªmites y entre ceja y ceja tiene un objetivo claro que ya le desvel¨® a su padre cuando ten¨ªa cinco a?os: "Un d¨ªa voy a ser el mejor del mundo".