18 a?os de la octava Copa de Europa del Real Madrid

24/05/2000 Par¨ªs fue testigo de la conquista de la Octava Copa de Europa del Real Madrid. El saludo de Ra¨²l y Mendieta, los dos l¨ªderes.

24/05/2000 Par¨ªs fue testigo de la conquista de la Octava Copa de Europa del Real Madrid que gan¨® por 3-0 al Valencia . Ra¨²l, tras correr 50 metros dribl¨® a Ca?izares para conseguir el tercer tanto

24/05/2000 Par¨ªs fue testigo de la conquista de la Octava Copa de Europa del Real Madrid que gan¨® por 3-0 al Valencia. McManaman empalm¨® una volea en el aire para aventajar a los madridista.

24/05/2000 Par¨ªs fue testigo de la conquista de la Octava Copa de Europa del Real Madrid que gan¨® por 3-0 al Valencia. Morientes aprovech¨® su picard¨ªa y buena colocaci¨®n para rematar un pase de Salgado y subir el primer gol al marcador.

El equipo posa con la octava Copa de Europa.

Iv¨¢n Campo, Ra¨²l y Sanch¨ªs levantan la Octava Copa de Europa entre la alegr¨ªa de sus compa?eros.

Los jugadores del Real Madrid mantean a Vicente del Bosque.

Ra¨²l levanta la Copa de Europa.

Los jugadores del Madrid celebran la octava Copa de Europa.

Redondo y Fernando Hierro celebran la octava Copa de Europa.

La conquista de la Octava Copa de Europa, todo un hito enla historia del f¨²tbol, no pas¨® inadvertida para nadie. La gente esper¨® a la plantilla madridista y fue su fiel compa?era en el gran recorrido desde el aeropuerto hasta desembocar en la madrile?¨ªsima y m¨ªtica fuente de La Cibeles.

La conquista de la Octava Copa de Europa, todo un hito enla historia del f¨²tbol, no pas¨® inadvertida para nadie. La gente esper¨® a la plantilla madridista y fue su fiel compa?era en el gran recorrido desde el aeropuerto hasta desembocar en la madrile?¨ªsima y m¨ªtica fuente de La Cibeles.

El equipo visit¨® la sede de La Comunidad de Madrid.

As¨ª estaba la Plaza de Cibeles para recibir a los campeones.

As¨ª estaba la Plaza de Cibeles para recibir a los campeones.

La conquista de la Octava Copa de Europa, todo un hito enla historia del f¨²tbol, no pas¨® inadvertida para nadie. La gente esper¨® a la plantilla madridista y fue su fiel compa?era en el gran recorrido desde el aeropuerto hasta desembocar en la madrile?¨ªsima y m¨ªtica fuente de La Cibeles.