La "alegr¨ªa perfecta" de Quini llevar¨¢ al Sporting a Primera
Alfredo Rela?o, director de As, se encarg¨® de conducir un homenaje a una figura con la que "el peri¨®dico siempre estuvo agradecido y en deuda; hab¨ªa que saldarla de esta forma".

Gij¨®n acogi¨® en la tarde-noche de ayer un emotivo y entra?able Encuentro con los Ases, en el que todos los participantes se encargaron de recordar la figura de quien ha sido todo un emblema del f¨²tbol espa?ol: Enrique Castro, Quini. Su hermano Falo se sum¨® a la cita que concluy¨® con el convencimiento de que El Brujo volver¨¢ a fabricar goles para el ascenso de su querido Sporting.
Alfredo Rela?o, director de As, se encarg¨® de conducir un homenaje a una figura con la que "el peri¨®dico siempre estuvo agradecido y en deuda; por tanto, hab¨ªa que saldarla de esta forma". El periodista estuvo rodeado en todo momento de quienes fueron compa?eros de Quini en todas sus etapas en el Sporting e incluso del actual entrenador del equipo gijon¨¦s, Rub¨¦n Baraja, que no dud¨® en acudir a la convocatoria.
Puente, Churruca, Ur¨ªa, Cundi, Redondo, Eloy, Mino o Tati, futbolistas que compartieron vestuario con Quini, pasaron por el Recinto Ferial Luis Adaro, pegado al centenario estadio El Molin¨®n. Todos recordaron an¨¦cdotas y la personalidad de quien, para Puente, encarn¨® "la alegr¨ªa perfecta". Tampoco faltaron entre el p¨²blico quienes le tuvieron muy cerca, como el ex centrocampista rojiblanco Dani Borreguero, afincado en Gij¨®n, o Pablo Acebal, canterano en Mareo y varios a?os importante en el filial.
Falo Castro, hermano del legendario delantero, abri¨® la serie, con la emoci¨®n siempre a flor de piel. Fue el recuerdo del lado m¨¢s familiar. "En mi casa, hasta el perro, que se llamaba Gol, fue portero, pero Quini fue delantero porque era el m¨¢s bajo de los hermanos", apunt¨®.
A partir de ese momento, comenzaron a fluir, incluso desde el p¨²blico, detalles del personaje m¨¢s o menos conocidos. Dos centenares de personas acudieron a la llamada de este otro homenaje al Brujo del Sporting. "Yo no le llamaba Brujo porque ya lo era como delantero, yo le llamaba Besugo por lo que parec¨ªa cuando abr¨ªa los ojos", revel¨® Puente. "Siempre le pregunt¨¦ si con aquella mirada, abriendo tanto los ojos pod¨ªa ver las porter¨ªas m¨¢s grandes que nadie", a?adi¨®.
Cundi ech¨® la vista atr¨¢s hasta su primer contacto con el delantero, "en 1972, ya consagrado como goleador". El que fuera lateral izquierdo sportinguista tir¨® de an¨¦cdota, con el permiso de la v¨ªctima (presente en la sala), para contar cuando Quini le clav¨® a Redondo unas botas camperas al suelo que impidi¨® al que fuera lateral derecho avanzar un cent¨ªmetro despu¨¦s de sufrir para pon¨¦rselas. Las hubo que tirar a la basura, por supuesto.
Eloy comenz¨® recordando aquella primera foto con Quini, tras un entrenamiento en Mareo con el equipo del Colegio Inmaculada. Unos pocos meses m¨¢s tarde, se entrenaba a su lado y debutaba con el Sporting. "Con Quini aprend¨ª muchas cosas, pero sobre todo te ense?aba a colocarte en el ¨¢rea, a rematar, porque ten¨ªa una capacidad especial, innata". Mino se detuvo en el recuerdo de Quini como un futbolista sin un f¨ªsico especial, "pero con una gran capacidad para anticiparse y rematar".
Y Churruca sinti¨® la emoci¨®n de todos a revivir tantos instantes al lado de Quini. "Hasta la mili hicimos juntos", dijo quien considera que "Quini nos hac¨ªa mejores extremos a todos los que jug¨¢bamos en la banda porque lo remataba todo".
Un aficionado expres¨® su convencimiento en el ascenso del Sporting porque "juega desde ahora con uno m¨¢s desde arriba".
La emoci¨®n se desbord¨® y Falo Castro agradeci¨® otra vez tanto cari?o: "Pero tampoco quiero olvidar la otra parte de mi coraz¨®n, que es mi otro hermano, Jes¨²s. Ah¨ª siempre estar¨¢n los dos".