Amelia del Castillo, la mujer que cambi¨® la historia del f¨²tbol
Fue la primera presidenta de un club de f¨²tbol de Espa?a. El 15 de octubre de 1963 fund¨® el Atl¨¦tico de Pinto y actualmente el campo de f¨²tbol lleva su nombre.
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No es un cipr¨¦s, pero su sombra tambi¨¦n es alargada. Mucho m¨¢s, de hecho. La historia de Amelia del Castillo sigue siendo un referente para todas las mujeres dentro del f¨²tbol. La primera mujer que presidi¨® un club de f¨²tbol en Espa?a. Para hablar de ella, hay que ponerse en pie. En una ¨¦poca en la que la mujer era pr¨¢cticamente un cero a la izquierda en la sociedad, Amelia del Castillo fund¨® un club de f¨²tbol para la localidad madrile?a de Pinto.
Su pasi¨®n por el f¨²tbol le llev¨® a romper las barreras estipuladas en este deporte. Ella, que durante los a?os 60 hab¨ªa recorrido estadios proclamando su amor por el f¨²tbol, cumpli¨® su sue?o el 15 de octubre de 1963, fecha en la que fue creada el equipo de Pinto. Todo esto en un contexto en el que la mujer en Espa?a necesitaba la autorizaci¨®n marital para disponer de sus bienes, abrir una cuenta bancaria, ejercer el comercio, no pod¨ªan sacarse el carnet de conducir ni divorciarse y su consentimiento no era necesario en el caso de que el padre de sus hijos quisiera darlos en adopci¨®n.
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Amelia del Castillo fue una pionera, pero no lo tuvo nada f¨¢cil hasta convertirse en un mito imborrable de nuestra historia. Para empezar, tuvo que ejercer tres tareas simult¨¢neas a la par que complicadas: delegada, entrenadora y presidenta. Como tal, su compromiso la llev¨® a buscar sustento econ¨®mico para garantizar la supervivencia del club. Y recurri¨® al gran amor de su vida: el Atl¨¦tico de Madrid.
Tal y como ha contado Amelia en numerosas entrevistas a lo largo de su vida, durante esa ¨¦poca se le ocurri¨® la idea de escribirle una carta a Vicente Calder¨®n, el presidente del club rojiblanco por aquel entonces, para pedirle que participara en el sorteo de una c¨¢mara de fotos que el club organiz¨® para lograr unas cuantas pesetas. La presidenta pinte?a solicitaba a Calder¨®n que le comprara unas papeletas para ayudar al club. Su sorpresa lleg¨® cuando el m¨¢ximo mandatario atl¨¦tico no s¨®lo compr¨® todas sino que la recibi¨® en sus oficinas de Desenga?o.
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El Pinto recibi¨® una enorme ayuda del Atl¨¦tico, club que le brind¨® servicios m¨¦dicos y le ayud¨® con la financiaci¨®n. Adem¨¢s, Vicente Calder¨®n tambi¨¦n cedi¨® materiales de construcci¨®n de su propia empresa para ayudar al Pinto a cerrar su campo de f¨²tbol, un requisito indispensable para la Federaci¨®n. Fue entonces cuando Amelia decidi¨® que definitivamente, la palabra "Atl¨¦tico" deb¨ªa aparecer en el bombre de su club. Sin embargo, no s¨®lo el Atl¨¦tico ayud¨® a la supervivencia del club. Tambi¨¦n el Rayo Vallecano, el Real Madrid y el Consejo Superior de Deportes pusieron su granito de arena.
Momentos duros y una gran recompensa
Por aquel entonces Amelia era una atracci¨®n m¨¢s en el f¨²tbol. Nadie se pod¨ªa creer que hubiera una mujer dirigiendo un equipo compuesto por hombres. Era algo impensable en aquella ¨¦poca. Una revoluci¨®n. Tanta fue su repercusi¨®n que incluso la CBS de Nueva York vino a Espa?a a entrevistarla. Sin embargo, su recorrido en el Atl¨¦tico de Pinto tambi¨¦n pas¨® por momentos duros. Concretamente cuando se vio forzada a dimitir por el alcalde de la ciudad, que amenaz¨® a Amelia con crear otro club que tuviera el apoyo econ¨®mico de la Casa Consistorial. Y tras tanto esfuerzo por crear un equipo de la nada, Amelia decidi¨® dejar su cargo para no ver su obra destruida.
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En cualquier caso, nadie en el mundo del f¨²tbol pudo olvidar a Amelia, su legado y su labor. Y es por eso que la primera presidenta de un club de f¨²tbol en Espa?a vio recompensado su esfuerzo en el a?o 2000. El presidente de su club por aquel entonces decidi¨® emprender una colecta de firmas para cambiar el nombre del campo de f¨²tbol del Atl¨¦tico de Pinto. Desde agosto de ese mismo a?o, el Amelia del Castillo es el feudo en el que el Atl¨¦tico de Pinto sigue escribiendo su historia, una que va ligada de la de su fundadora, una pionera que abri¨® paso a las mujeres en los altos cargos del mundo del f¨²tbol.