El partido de ma?ana en el estadio Santiago Bernab¨¦u va a ser el primer acto de una eliminatoria muy atractiva por muchos aspectos. Primero, porque los enamorados del f¨²tbol podr¨¢n admirar en un mismo terreno de juego a algunos de los mejores jugadores del mundo como Cristiano, Neymar, Modric, Sergio Ramos o Mbapp¨¦, entre tantas y relucientes estrellas que provocan una admiraci¨®n absoluta y la sana envidia de las aficiones de los dem¨¢s equipos. Segundo, porque, por distintas razones, tanto el Madrid como el PSG necesitan ganar s¨ª o s¨ª y pasar a la siguiente ronda. Como todos sabemos muy bien, al equipo blanco s¨®lo le queda la Champions para salvar una mala temporada en Liga y en Copa del Rey y al equipo franc¨¦s ya no le puede bastar con conquistar, con facilidad (casi por inercia), los trofeos nacionales como la Ligue1, la Copa de Francia o la Copa de la Liga. El PSG necesita como agua de mayo dar un pu?etazo en la mesa en la m¨¢xima competici¨®n europea y ser, por fin, reconocido a nivel internacional. Y no seguir viviendo a la sombra de los hist¨®ricos y temidos ¡°mastodontes¡± del f¨²tbol continental. Recordamos en este sentido que el PSG s¨®lo tiene 48 a?os, es decir menos de la mitad de la edad del Madrid. Sin embargo, las consecuencias de una eliminaci¨®n ser¨ªan muy diferentes para cada uno de los dos clubes. El Madrid tendr¨ªa que dar ya por finiquitada la temporada en un momento extremamente precoz y se abrir¨ªa una crisis¡ ?De cuatro meses! Hasta que empezase el mercado de fichajes y que Florentino P¨¦rez sacase la chequera para ilusionar al madridismo con nuevos jugadores.
Adem¨¢s, el colch¨®n de ocho t¨ªtulos conquistados en los dos ¨²ltimos a?os ayudar¨ªa a amortiguar un poco la ca¨ªda y a esperar las nuevas incorporaciones. En cambio, quedar fuera de la m¨¢s prestigiosa competici¨®n europea ser¨ªa un aut¨¦ntico desastre para el PSG, un club que nunca ha pasado de los cuartos de final y que sufre mucho por ello. Un a?o despu¨¦s de la humillaci¨®n contra el Bar?a (derrota por 6-1 despu¨¦s de una victoria por 4-0 en la ida en el Parque de los Pr¨ªncipes), algo que dej¨® a los parisinos en estado de shock durante varias semanas, volver a caer tan temprano en la Champions har¨ªa tambalear los propios cimientos del ambicioso proyecto qatar¨ª. Los propietarios llegados del Golfo P¨¦rsico han hecho el verano pasado inversiones alucinantes que obligan a triunfar ya. Perder contra el Madrid, aunque estemos hablando del vigente doble campe¨®n de Europa, har¨ªa que los responsables del PSG tuvieran que asumir sus responsabilidades y tomar decisiones dr¨¢sticas ante un nuevo fracaso de amplitud.
Ma?ana, en el Bernab¨¦u, el Madrid se juega algo estrictamente deportivo y a corto plazo. El PSG mucho m¨¢s. De ah¨ª la tensi¨®n que se ha podido detectar en los ¨²ltimos d¨ªas alrededor del equipo de la capital francesa. Del optimismo y la excitaci¨®n que se palpaban hace unas semanas al comprobar las derrotas y los empates del Madrid en la Liga espa?ola se ha pasado a cierto nerviosismo al darse cuenta, por ejemplo, que exist¨ªa en el equipo de Emery un serio problema en el mediocampo y con los dos laterales. Por sus medios y sus ambiciones, el PSG ya es una entidad que inspira respeto, pero nadie sabe si sabr¨¢ pasar con ¨¦xito la prueba m¨¢s dif¨ªcil que hay en Europa. La prueba del Bernab¨¦u.