El C¨¢diz se disfraza de ¨¦pica por Carnaval y sigue segundo

Partido de dos equipos muy parecidos, con ideas similares en cuanto al camino hacia el gol que dej¨® pocas ocasiones claras de gol, sobre todo en la primera parte. Un cabezazo de Barral desde el coraz¨®n del ¨¢rea que hizo sacar el pu?o a Alfonso Herrero fue el acercamiento m¨¢s peligroso de los amarillos en los primeros compases, mientras que el Oviedo no terminaba de conectar el ¨²ltimo pase, siendo Aar¨®n un quebradero de cabeza con sus movimientos entre l¨ªneas.

Con los dos equipos esperando la oportunidad de salir al contragolpe, todo era m¨¢s dif¨ªcil, ya que tanto Cervera como Anquela coincidieron en la idea de acumular hombres atr¨¢s y evitar la aparici¨®n de huecos en sus defensas, y ninguno de los conjuntos ocultaron sus cartas, aunque al Oviedo le cost¨® una expulsi¨®n, al llegar Rocha muy tarde a la presi¨®n en una jugada aislada. Una acci¨®n innecesaria que pudo hacer mucho da?o a Carpio y que Pulido Santana no dud¨® en mostrarle la cartulina roja.

En inferioridad num¨¦rica, el cuadro asturiano busc¨® reaccionar a base de orgullo a la expulsi¨®n y con un lanzamiento de falta de Sa¨²l Berj¨®n logr¨® poner en apuros la porter¨ªa de Cifuentes, que sac¨® la mano para evitar que el bal¨®n se abrazara a la red. No obstante, fue el C¨¢diz quien despidi¨® la primera parte volcado en el ¨¢rea visitante, aunque sin opciones de intimidar al portero.

Con estos t¨ªmidos acercamientos amarillos iba a reanudarse el encuentro, pero ser¨ªa Miguel Linares quien se har¨ªa grande en el ¨¢rea gaditana para enviar al fondo de la red, de un testarazo, una falta botada desde la banda derecha por Sa¨²l Berj¨®n. Corr¨ªa el minuto 54 y los carbayones, a bal¨®n parado, se adelantaban en el marcador, siendo este gol la chispa que despert¨® al C¨¢diz.

Como era l¨®gico, despu¨¦s del gol el Oviedo sac¨® su lado m¨¢s defensivo y conservador, mientras que el equipo amarillo fue ganando presencia en el ¨¢rea asturiana. Alberto Perea, que no llevaba mucho tiempo en el terreno de juego, dej¨® sentado a dos defensas en el interior del ¨¢rea para posteriormente enviar un derechazo a la escuadra en el minuto 72, suponiendo un subid¨®n de moral en los cadistas.

Siete minutos despu¨¦s, Servando, con la cabeza, daba la vuelta al marcador a la salida de un c¨®rner, haciendo estallar de alegr¨ªa el coliseo gaditano a falta de once minutos para el tiempo reglamentario. Anquela, que daba entrada a Toch¨¦, no ces¨® en la b¨²squeda de contragolpes, aunque finalmente el C¨¢diz se qued¨® con la victoria y la segunda plaza.