Ibrahimovic: "Los franceses me llam¨¢is arrogantes y sois como yo, deber¨ªais adorarme"
El delantero del Manchester United volvi¨® a mostrar su genio y denunci¨® episodios de racismo que ha vivido en Suecia.
Zlatan Ibrahimovic en estado puro. En unas declaraciones en Canal+ Francia, el delantero del Manchester United su genio pol¨ªticamente incorrecto y arremeti¨® contra el propio p¨²blico galo. "Aqu¨ª en Francia tuve problemas con vuestra actitud. Extra?o. ?Por qu¨¦? Por lo que dec¨ªs y hac¨¦is. Vosotros me llam¨¢is arrogante y los franceses son conocidos por ser arrogantes. As¨ª que soy exactamente como vosotros. Deber¨ªais adorarme, porque estoy representando a Francia muy bien, dec¨ªa muy seriamente el ariete, que jug¨® cuatro temporadas en el PSG, ante las risas del entrevistador, el exfutbolista Olivier Dacourt.
Episodios de racismo
Pero esa frase fue solo una an¨¦cdota de una entrevista en la que Ibahimovic, de ascendencia bosnio-croata, narr¨® sus inicios dif¨ªciles y c¨®mo a¨²n percibe en Suecia actitudes racistas hacia ¨¦l. El futbolista comenz¨® contando un episodio que protagoniz¨® en los juveniles del Malmoe: "Cuando llegu¨¦ al Malmoe, no fui aceptado como los dem¨¢s. ?Por qu¨¦? Porque yo era Ibrahimovic. No era Andersson, no era Svensson, todos esos apellidos t¨ªpicamente suecos. Yo era extranjero. (...). Tuve un incidente en un entrenamiento, me hicieron una entrada y le di un cabezazo a un compa?ero, porque estaba enfadado. Su padre era agente de polic¨ªa. ?l firm¨® una carta para el club pidiendo que fuera expulsado y dio ese papel a todos los jugadores del equipo y dec¨ªa: 'firma esto si est¨¢s de acuerdo en que Zlatan debe ser expulsado'. Yo estaba en juveniles. ?Puedes imaginar c¨®mo me sent¨ªa cuando pas¨® eso? Me sent¨ªa como que no encajaba, como la oveja negra. No aceptaban mi actitud, no me aceptaban como persona, no me hac¨ªan sentir bienvenido. Era diferente, ten¨ªa una cara diferente, no era rubio, no ten¨ªa la piel blanca como los suecos. Sufr¨ª en el sentido de que no era tan f¨¢cil para m¨ª como para los dem¨¢s. Sent¨ªa que ten¨ªa que hacer diez veces m¨¢s para ser visto como los dem¨¢s".
Con una carrera ya consagrada en el ¨¢mbito de clubes y en la selecci¨®n de Suecia, Ibrahimovic siente que no recibe el trato que merece por parte de los medios de su pa¨ªs: "Todav¨ªa hoy es as¨ª. ?Qu¨¦ hacen hoy los medios suecos? ?Me defienden o me atacan? Todav¨ªa me atacan. Porque todav¨ªa no aceptan que sea Ibrahimovic. Si otro jugador sueco cometiera los errores que yo cometo, le defender¨ªan. Pero cuando se trata de m¨ª no me defienden. Pero eso me hace m¨¢s fuerte. Esto es racismo, es racismo encubierto. Existe, estoy seguro. Porque yo no soy Andersson o Svensson. Si fuera as¨ª, cr¨¦eme, me defender¨ªa incluso si robara un banco. Me defender¨ªan, te lo digo. Pero no me defienden de la forma en que deber¨ªan, porque yo probablemente sea el mejor jugador de la historia de Suecia. Nadie ha hecho lo que yo. El que m¨¢s balones de oro suecos ten¨ªa, gan¨® dos. ?Cu¨¢ntos tengo yo? 11. Lo que yo he hecho por el f¨²tbol sueco, no ha ocurrido jam¨¢s", contaba Ibrahimovic antes de ser interrumpido por el entrevistador. "?Puede que sea porque eres arrogante?", le interpel¨® Dacourt. "No importa, soy el mejor", se justific¨® Zlatan.
Su padre dej¨® de pagar el alquiler para que puediera jugar
Como en el caso de Cassano, durante su infancia Ibrahimovic pas¨® problemas econ¨®micos en el seno de su familia. Incluso en una ocasi¨®n, su padre tuvo que dejar de pagar el alquier para que pudiera participar en un torneo con el Malmoe. "Mi madre y mi padre hicieron todo lo que pudieron para m¨ª. La econom¨ªa era... no hab¨ªa econom¨ªa. Te doy un ejemplo. Yo ten¨ªa que ir a un torneo con el Malmoe. Ten¨ªa 15 a?os y para jugar ese torneo ten¨ªa que pagar. El club no te pagaba y yo no pod¨ªa. Y mi padre, en vez de pagar un mes el alquiler del apartamento en el que viv¨ªamos, me dio el dinero para ir y jugar el torneo. El mes siguiente ¨ªbamos a tener que pagar dos rentas de golpe y no nos iba a quedar nada. As¨ª que ¨ªbamos a comer a casa de mi madre, pero se quejaba de que estaba comiendo demasiado. Yo no com¨ªa desayuno, comida, cena... Com¨ªa una vez, pero me aseguraba de que no fuera a tener hambre durante dos d¨ªas".
