El 'apocalipsis' de Tavecchio ya es realidad: Italia, por primera vez en 60 a?os, no participar芍 en un Mundial. Una humillaci車n hist車rica que, si de un lado manifiesta la crisis del deporte rey italiano, del otro lleva la firma de Giampiero Ventura, incapaz de darle una identidad t芍ctica a su selecci車n. El t谷cnico insisti車 en trabajar sobre un 4-2-4 que se demostr車 un sinsentido, y volvi車 en los partidos decisivos a un 3-5-2 que 谷l mismo hab赤a definido como un dibujo "antiguo".
La tensi車n y la rabia que se vivieron en el Bel Paese se manifestaron durante el himno sueco, que fue vergonzosamente pitado por la mayor赤a de San Siro. Buffon reaccion車 aplaudiendo a sus rivales?y el estadio capt車 el mensaje del capit芍n con una ovaci車n para Johansson, autor del 1-0 de Solna, que abandon車 el c谷sped por lesi車n tras 17 minutos.
Ventura confirm車 la sorprendente alineaci車n que se filtr車 en la v赤spera: en el mediocampo actuaron Jorginho en su estreno oficial con la Azzurra, Florenzi en una posici車n que ya casi nunca ocupa, y en el ataque, al lado de Immobile, apost車 por Gabbiadini, que con el actual seleccionador apenas sumaba 35 minutos.
El comienzo del partido fue intenso como se esperaba, y Mateu Lahoz fue protagonista: Italia pidi車 un penalti por una falta de Agustinsson sobre Parolo, Suecia pidi車 otros dos por las manos de Darmian y Barzagli. Todos pod赤an haber sido concedidos. El colegiado, adem芍s, sac車 cuatro amarillas en la primera mitad, dos para cada equipo: con su vara de medir, en el partido de ida, Suecia hubiese acabado con ocho.
Italia fue de menos a m芍s cuando Bonucci (que jugaba heroicamente con la nariz previamente rota por Toivonen y con un fuerte dolor en la rodilla) dej車 de sentirse 'regista', distribuyendo pases largos a diestro y siniestro, y le dej車 el control de las operaciones a Jorginho. El mediocampista del N芍poles fue el mejor de los suyos con diferencia, y eso que Ventura, hasta septiembre, le defin赤a como poco adaptado a su sistema de juego. Todos los peligros que cre車 la Azzurra nacieron de sus jugadas: en el 40', por ejemplo, con un gran pase vertical puso a Immobile solo delante de Olsen, que se salv車 gracias a un despeje de Granqvist a un paso de la l赤nea de gol. Antes del descanso los italianos se acercaron al gol cuatro veces m芍s, pero a Parolo, Florenzi y Bonucci les faltaron suerte y punter赤a.
Suecia estuvo contra las cuerdas durante toda la segunda mitad, que fue un mon車logo azzurro. Nada m芍s empezar, Lustig dej車 ko a Darmian con un rodillazo en plena 芍rea, pero Lahoz, una vez m芍s, no concedi車 penalti. El asalto continu車 con prisa, agobio, pero sin pausa: Florenzi acarici車 el poste con una bonita volea y luego golpe車 al travesa?o con un centro desviado por el propio Lustig. Ventura sac車 a El Shaarawy, Belotti y Bernardeschi, dejando fuera, incre赤blemente, a Insigne, que apenas disput車 13 minutos entre ida y vuelta. Fueron ataques desordenados, desesperados, y a Suecia apenas le hizo falta mantener compactas su dos l赤neas para aguantar el 0-0, que nunca se movi車 del marcador.
Se acab車 as赤: los suecos celebraron su regreso a un Mundial tras ocho a?os, Italia llor車 su primera ausencia en 60. Buffon, tras el pitido final, pidi車 perd車n a los italianos anunciando su adi車s a la Nazionale: el del 2018 habr赤a sido su sexto mundial, un r谷cord, justo en Rusia, donde hace 20 a?os visti車 por primera vez la azzurra. Su cara humedecida por las l芍grimas es la imagen de todo un pa赤s.