Piqu¨¦ niega la sanci¨®n de tr¨¢fico que le imputa la Prensa inglesa
Mirror publica im¨¢genes suyas detenido en el arc¨¦n de una autov¨ªa mientras hablaba con un agente. Mossos y futbolista niegan la sanci¨®n sin explicar por qu¨¦ fue paradoDeportivo - Betis
Gerard Piqu¨¦ se ha visto envuelto en una nuevo pol¨¦mica extradeportiva. Seg¨²n publica el diario ingl¨¦s Mirror, el jugador del Barcelona habr¨ªa sido cazado por una patrulla de los Mossos d'Esquadra circulando por una autopista de circunvalaci¨®n de Barcelona a una alta velocidad, aunque sin detallar en cu¨¢nto habr¨ªa sobrepasado el l¨ªmite. El jugador y los Mossos negaron la infracci¨®n, pero tampoco explicaron por qu¨¦ fue parado. Seg¨²n esa informaci¨®n desmentida le quitaron seis puntos del carnet de conducir.
El peri¨®dico ingl¨¦s publica las im¨¢genes del jugador dentro de su veh¨ªculo detenido en el arc¨¦n, mientras que uno de los agentes se dirige a ¨¦l y parece tomarle sus datos. El futbolista, que viajaba en un Audi A6 familiar, detall¨® en Twitter su versi¨®n sobre la noticia y neg¨® que fuese sancionado: ?"Un paparazzi te hace una foto hablando con los Mossos d'Esquadra.?El paparazzi se inventa que iba a 190km/h y que me sacaron 6 puntos de carnet para poder vender las fotos por 1.500 euros. Todo mentira.?Un medio ingl¨¦s compra las fotos sin importarle la veracidad de la historia.?La mayoria de medios de este pa¨ªs difunden la not¨ªcia sin corroborar la informaci¨®n. Todo para obtener m¨¢s clicks.?El da?o ya est¨¢ hecho y nadie hace nada para cambiar esta din¨¢mica".
El jugador del Barcelona termin¨® con el anuncio de la creaci¨®n de un medio de comunicaci¨®n: "Mi objetivo en los pr¨®ximos meses es crear un medio de comunicaci¨®n que sea diferente, veraz, aut¨¦ntico y de los jugadores. Estoy harto".
Piqu¨¦ ya tuvo un incidente con la Guardia Urbana en octubre de 2014. El jugador del Barcelona fue multado con 10.500 euros por el altercado al decir al polic¨ªa: 'Esta multa la va a pagar tu padre', adem¨¢s de decir que le daba asco la Guardia Urbana y que los agentes eran unos muertos de hambre y multaban para cobrar comisi¨®n.
El agente relat¨® que el incidente se produjo cuando ¨¦l y un compa?ero prestaban servicio en el barrio de la Barceloneta y se dirigieron hacia un Audi que llevaba unos 20 minutos aparcado en un carril de circulaci¨®n, con la intenci¨®n de sancionar al conductor. Al dirigirse al conductor, el futbolista --que tambi¨¦n estaba en el coche-- sali¨® del veh¨ªculo, comenz¨® a increparle y le pregunt¨®: '?Vas a denunciar a mi hermano?', seg¨²n el agente, que asegur¨® que el futbolista tambi¨¦n dijo que iba a llamar a su jefe y que los polic¨ªas estaban all¨ª solo para 'joder' y 'tocar los cojones'.
En el juicio, el abogado de Piqu¨¦ ley¨® una carta del futbolista en la que reconoci¨® que su conducta fue desafortunada: "Intentar¨¦ que no se vuelva a repetir". "Me equivoqu¨¦", admiti¨® el futbolista en la carta, y asegur¨® que acatar¨ªa la sentencia, pero mostr¨® su discrepancia con el atestado policial ya que ¨¦l no reconoce la mayor¨ªa de las expresiones que aparecen en el mismo, pero s¨ª las que han quedado registradas en v¨ªdeos de testigos.
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